Llegó, dominó y venció. Y que pase el siguiente. El Huesca se convirtió este sábado en un huracán que tomó tierra en el Juegos Mediterráneos, dejando al Almería agazapado en su campo esperando a que pasara la tormenta, con Cucho Hernández repartiendo rayos y truenos. Y aunque el colombiano concentró nuevamente los focos con su doblete goleador, el mérito azulgrana volvió a ser coral, dejando claro que estos tres triunfos consecutivos que suman ya los de Rubi, esconden mucho trabajo detrás, y lo que es más importante, dibujan por delante un prometedor recorrido. Por ahora, a expensas del final de la jornada, el Huesca se encarama a la parte alta, empatado a puntos con el líder.

El hecho de que el segundo tanto oscense, obra de Melero al borde del descanso, llegara en posición forzada, casi con la espuela, es la mejor representación del momento que atraviesa el Huesca. Impulsado por una confianza que hace que parezca fácil plantar bandera con un contundente 0-3 en un estadio en el que no había vencido todavía nadie. Y hacerlo además con un once renovado, introduciendo tres cambios.

Porque Rubi llevó a la máxima expresión su tantas veces manifiesta intención de que su pizarra se dibuja con méritos. En base a ello, bajó directo de la grada al once titular a Álvaro Vadillo, que se había quedado fuera contra el Rayo Vallecano. También alineó de inicio a Álex Gallar. Quiso así darles la oportunidad de reivindicarse a los dos, y ambos respondieron con creces. De hecho, una buena jugada cuando se cumplía el minuto diez en el estadio almeriense, en una contra conducida por Vadillo que a punto estuvo de encontrar primero el remate de Gallar y más tarde la de Cucho, no acabó dentro, pero era el anticipo de lo que iba a ser el ataque oscense.

Una línea defensiva muy adelantada, -con Alexander y Akapo como laterales ante lesión de Brezancic-, y mucha velocidad y descaro para presionar la del rival fue la fórmula que utilizó el Huesca para jugar desde el inicio en el campo del Almería. Tardó en llegar la primera clara, pero pronto se hizo evidente que los de Rubi iban a tener la iniciativa.

Pudo cambiar el guión en el minuto 23, con un disparo envenenado de Pozo que obligó a Remiro a estirarse, pero el meta estuvo atento para demostrar una semana más, que el equipo tiene el mejor seguro bajo palos. Y si las paradas oscenses tienen protagonista indiscutible, también el gol en el Huesca parece contar con dos nombres propios: Cucho y Melero. Una buena asistencia al hueco de Gallar, hizo que el colombiano –convertido esta vez en delantero centro- no perdonara el primero, cuando todavía no se había cumplido la media hora de juego, controlando perfecto y batiendo cruzado a René.

El gol dio más argumentos al Huesca para seguir creyendo en sus posibilidades de prorrogar su racha victoriosa, y tras varias llegadas de peligro comandadas por sus extremos y con un Cucho Hernández imparable, llegó el segundo visitante, en un córner servido por Vadillo con un remate forzado de Melero, que al no llegar de cabeza tiró de espuela para enviar a la red. Pudo ser mayor el botín antes del paso por vestuarios, pero a Cucho Hernández se le fue demasiado alta la definición de una buena contra que comandó junto a Vadillo y Gallar.

Se desquitó de ese error el joven delantero, ya que apenas siete minutos después de la reanudación hizo el tercero, al ponerle en bandeja Melero el disparo, tras aprovechar ambos un claro error defensivo del Almería, cuyos defensas no se entendieron.

Lucía un 0-3 en el marcador a falta de algo menos de 40 minutos de juego, y así pudo el Huesca dejarle la iniciativa al Almería, que ganó protagonismo con los cambios. Pero aún así se mostró incapaz de doblegar a la bien situada defensa azulgrana, secundada nuevamente por Aguilera, Melero y Sastre, que formando en trivote, van camino de convertirse en el medio campo más cotizado de la categoría.

No hubo lugar para ningún susto más, e incluso pudieron hacer el cuarto Vadillo, Gallar o Akapo en disparo lejan. Rubí durmió ya de manera definitiva el encuentro, dando salida a Luso para apagar posibles incendios y guardando de los minutos finales a Melero y Cucho, pues al Huesca le espera una nueva jornada este martes contra el Reus, después de acometer el largo viaje de regreso a la capital oscense. Poco tiempo, por tanto, queda para disfrutar de algo tan cotizado en la Segunda División como son tres victorias consecutivas, y ante rivales tan potentes como Valladolid, Rayo Vallecano y Almería. Pero más allá de las triunfos y los puntos, queda la evidencia de que el Huesca ha encontrado su estilo, y llevándolo a su mejor versión, como este sábado en el Juegos Mediterráneos, pocos rivales podrán hacer sufrir a este equipo.

Ficha del partido 

Almería: René, Fran Rodríguez, Joaquín, Owona, Nano, Mandi, Verza (Almenán, 46), Rubén Alcaraz, Fidel (Estupiñán, 68), Juan Muñoz (Caballero, 61) y Pozo.

SD Huesca: Remiro, Alexander, Pulido, Jair, Akapo, Aguilera, Sastre, Melero (Luso, 72), Gallar, Vadillo (Ferreiro, 84), Cucho.

Goles: 0-1, min. 27: Cucho Hernández. 0-2, min. 43: Melero. 0-3, min. 53: Cucho Hernández.

Árbitro: Ais Reig (comité valenciano). Mostró tarjeta amarilla a Vadilloy Alexander por la SD Huesca.

Incidencias: Partido correspondiente a la octava jornada de la Liga 123, disputado en el estadio de los Juegos Mediterráneos, ante 7.226 espectadores.