"Ya tenemos todos una idea y un horizonte común"

Víctor Muñoz considera que los días de convivencia en Gerona han servido para introducir en el vestuario las necesidades deportivas del club y hallar el compromiso de la plantilla

Víctor Muñoz reconoció ayer por la tarde en Palafrugell, en el último ensayo del Real Zaragoza previo al partido de esta tarde en Palamós, que la cita ante el Llagostera puede ser un momento culminante de este difícil arranque de temporada. "Yo creo que estamos ante un partido muy importante por que, tras dar el primer paso ganando al Alavés, si no le damos continuidad a las victorias, todo se quedará en nada", dijo el entrenador aragonés.


Muñoz, transcurrido el primer mes de competición, admite que ha llegado el momento de despertar e ir acabando con la excusa de la provisionalidad, hasta ahora justificada tácitamente por todo el mundo. "Vamos a hacer todo lo posible por jugar bien y ganar. El Llagostera está delante de nosotros en la tabla y con este triunfo lo pasaríamos y avanzaríamos mucho en la clasificación. Sabemos que ganar aquí supondrá creer un poco más en lo que estamos haciendo", subrayó.

El técnico explicó que su trabajo en estos días de concentración en la Costa Brava se ha centrado mucho más en el aspecto mental y psicológico de la plantilla que en el puramente futbolístico. "Hemos venido aquí principalmente para hablar. Sobe todo, para hablar. Hemos tenido varias charlas todos juntos, alguna también con carácter individual. Hemos dialogado sobre cómo tiene que ser el equipo, introduciendo a todo el mundo en una idea común. Contrastanto pareceres, dejando a todos que dieran opinión. Ha sido importante para el global del equipo", señaló el preparador.


Con la victoria perseguida esta tarde en Palamós, los profesionales del vestuario blanquillo quieren ubicar al equipo en una situación más firme y consistente que la vivida hasta hoy tras el extraño verano acontecido en el seno del club. "Queremos desde ahora poner un punto de mira concreto en el horizonte del grupo. Con la obligación de que todos rememos hacia el mismo lado. Esa es la idea que he transmitido a los jugadores desde el miércoles. Tanto en la competición como en los entrenamientos. Tanto en la vida particular como en las normas internas que nosotros mismos vamos a establecer", admitió en un claro mensaje de profundidad tras el titubeante inicio de la competición oficial.


Víctor es conocedor de que el grupo ha llegado demasiado disperso a esta 6ª jornada, fruto de la tardanza y las dificultades de todo tipo con las que ha ido completándose la plantilla. Por eso, después de estos cuatro días en San Feliu de Guíxols, el entrenador dice sentirse confiado en que el colectivo reaccione positivamente y lo sepa plasmar con un triunfo convincente ante el modesto Llagostera. "Creo que los jugadores tienen mucho interés en que todo vaya bien. Los he visto con ganas, con una predisposición fantástica. Estamos todos haciendo lo posible para que estos días de convivencia aquí sean útiles. Hemos venido a ganar tiempo y espero que se consiga el efecto pretendido. No tengo evaluación todavía, pero las ideas ya están lanzadas y la plantilla las ha recogido. Hay opiniones divergentes, debate y, al final, se ponen en conjunto para sacar la idea común válida. Estamos evolucionando hacia ese punto", dijo sin rodeos.

Espera un partido muy trabado

Una vez expuestas en alto las líneas maestras de por dónde ha discurrido la concentración en Gerona, Víctor Muñoz abordó en concreto el atípico partido de hoy frente al novel Llagostera en el campo neutral de Palamós. "Es un equipo que no brilla por las estrellas que tiene, sino por el juego colectivo. Se desenvuelven muy unidos, muy arropados siempre, con los conceptos claros. Muchos de ellos llevan años jugando juntos y ese es su gran valor. Por eso llevan ya 7 puntos, incluso más que nosotros", destacó. 


Víctor rechaza el lógico favoritismo que la historia y el caché otorgan, por pura naturaleza, esta tarde al Real Zaragoza. "Todo parece que es favorable para el Zaragoza, pero el partido hay que jugarlo. Ellos han ganado ya dos partidos y han empatado otro. Tienen fortaleza jugando como locales. No tienen una afición de 20.000 espectadores. Pero los que  haya van a presionar fuerte", remarcó con temor. "Espero que este sea el día en el que el Zaragoza crezca y nos metamos cerca de los puestos de cabeza", dijo.