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Terrer y Vacas, dos centrocampistas del filial que recluta Víctor Fernández
La baja por lesión de Aguado abre la necesidad de apuntalar la posición en los próximos partidos con piezas de la cantera. El aragonés Terrer ya debutó con Velázquez y Vacas fue un fichaje del verano, catalán.
Novedades importantes en la línea de medios del Real Zaragoza como consecuencia de la baja de Marc Aguado, confirmada por las pruebas radiológicas del martes en las que se apreció una lesión en el músculo aductor largo de la pierna derecha del jugador canterano, sufrida en la recta final de la primera parte del partido del sábado pasado en Leganés.
La ausencia de Aguado por este problema en la zona inguinal, que lo tendrá apartado del equipo durante al menos tres semanas, con serio riesgo por lo tanto de que ya no juegue en lo que resta de liga (las cinco últimas jornadas se van a dilucidar en solo 31 días), se añade a la de Francho, que ya acumula un largo tiempo de ausencia por una fascitis plantar que amenaza, asimismo, con dejarlo KO hasta que el torneo concluya.
Así, Víctor Fernández se ha quedado con solo tres mediocampistas en el primer equipo: Moya, Grau y Maikel Mesa, contando con que este último tiene una marcada vocación ofensiva y su papel nunca va a ser el de organizador o ancla en la medular sino, más bien, el de mediapunta o interior.
En el entrenamiento de este miércoles, segundo de cinco en la semana que desembocará en el partido de la jornada 38 contra el Burgos en La Romareda, Víctor ha contado con la presencia de dos centrocampistas de la cantera: el juvenil Lucas Terrer y el espigado pivote del filial Óscar Vacas. El técnico busca apoyos que puedan aliviar las ausencias y que ofrezcan al equipo alternativas solventes en caso de necesidad. Algo que ya ha utilizado puntualmente en otras posiciones, como en el debut hace cuatro días de Pablo Cortés en Leganés, el de otro juvenil como Liso nada más llegar al cargo hace mes y medio o la recuperación atomizada del delantero Pau Sans.
Terrer ya apareció en dos partidos en los estertores de Julio Velázquez como entrenador, antes de ser despedido en marzo. El menudo futbolista zaragozano de 18 años, tuvo sus primeros minutos ante el Amorebieta en La Romareda (0-1) y fue titular en Valladolid (2-0), el día en el que se produjo el cambio de entrenador. Después, entre la llegada de Fernández y la coincidencia con una lesión muscular, pasó a trabajar de nuevo en el escalón inferior y este miércoles ha regresado a la primera plantilla.
Vacas es una figura distinta. Veterano dentro del RZD Aragón con 22 años (cumplirá los 23 en agosto), fue uno de los escasos fichajes de verano para reforzar al equipo B en Segunda RFEF. Jugador catalán, nacido en Barcelona, llegó procedente del Terrassa y, anteriormente había militado en el Júpiter, la Santboiá y el Prat. Lo más destacado de Vacas es su estatura, de 1,99, extraordinaria en un jugador de su posición en el campo. No hay que explicar más cuáles son sus prestaciones principales en el sistema táctico.
Junto a ellos, han vuelto a trabajar con el primer equipo este miércoles Liso, Cortés y el lateral Juan Sebastián, otro que también gana enteros para tener su cuota de participación que, hasta hoy, se limita a la eliminatoria de Copa perdida en octubre con el Atzeneta valenciano.
