El Comité de Competición pasa por alto de nuevo el caso Mollejo

El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol se reunió ordinariamente este miércoles en Madrid para afrontar las sanciones relativas a la jornada 6, la pasada, y, por segunda semana consecutiva, no entró a valorar el caso Mollejo, delantero del Real Zaragoza, que sigue por lo tanto abierto desde el día 10 de este mes de septiembre, cuando el equipo aragonés ganó 1-3 en Cartagena.

La Liga presentó una denuncia el pasado día 12 acusando a Víctor Mollejo de «conducta contraria al buen órden deportivo» tras lo sucedido en el partido celebrado en el estadio de Cartagonova. El punta zaragocista se tocó los genitales tras conseguir marcar gol definitivo a favor de los aragoneses en el minuto 92 y, aunque el árbitro no reseñó nada en el acta, La Liga entró de oficio y la llevó, asimismo, ante la Comisión Antiviolencia. 

La semana pasada, hace 7 días, la premura de tiempo para estudiar el asunto y el hecho formal de que el juez del partido (el valenciano Ais Reig) no lo aportara escrito en su acta, sirvió como excusa para que Competición no abordara la cuestión en su reunió ordinaria. Se aguardaba con expectación las resoluciones de este miércoles 20 de septiembre, por sí Mollejo era objeto de valoración y fallo por parte de los jueces deportivos de la primera instancia federativa. Pero tampoco han considerado oportuno afrontar la demanda de La Liga y todo sigue pendiente. 

En su momento, incluso el presidente de la patronal del fútbol español, el abogado oscense Javier Tebas, hizo declaraciones relativas al episodio protagonizado por Mollejo en Cartagena, subrayando que "un futbolista no puede hacer gestos groseros en un terreno de juego", instando entre líneas a Competición a que ejerza una sanción ejemplar al zaragocista. En aquellas horas aún estaba candente y muy reciente todo el escándalo del ya expresidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, que sirvió de amplificador al desafortunado gesto de Mollejo. El jugador zaragocista tuvo que salir minutos después de acabar aquel partido, en un vídeo grabado por el club en los mismos vestuarios de Cartagonova, a pedir disculpas públicamente, asumir su pifia y, así, presentar un atenuante ante cualquier castigo que pueda estar por venirle.