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El Real Zaragoza enseña sus primeros brotes verdes
Los amistosos de Pinatar Arena dejan en la construcción del equipo de Escribá los primeros signos prometedores.
El paso por Pinatar y los amistosos de esta fase de la pretemporada han descubierto un Zaragoza de buenas hechuras, ideas claras y reconocibles y un fútbol sólido, serio y convincente. Después de vencer al Deportivo Aragón (3-0) y al Teruel (1-2), la concentración murciana elevó el nivel de exigencia y también la respuesta del equipo, con triunfos frente a Murcia (0-2) y Cartagena (1-2) y una dulce derrota contra el Stade de Reims (1-2), después de una notable primera mitad, el fallo de un penalti y la incidencia del desgaste físico tras jugar el día anterior y enfrentarse a un rival muy poderoso en el factor atlético como el equipo francés.
El Zaragoza ha dejado sensaciones muy positivas, signos prometedores en pleno proceso de definición de su ideario y modelo. Decía Juanma Lillo «dime con qué mediocentro juegas y te diré qué equipo eres». Pero el fútbol de hoy ha incorporado otra posición de valor contextual: el delantero centro. Y es en esas dos posiciones donde el Zaragoza más ha mutado y mejorado: no es lo mismo jugar con un centro del campo con perfiles como Zapater o Grau y una delantera con Giuliano Simeone a hacerlo con un timón como Marc Aguado y un punta como Bakis. Son, precisamente, estos dos nuevos fichajes a los que más se les han apreciado, como es natural, más aristas en sus adaptación táctica. No es lo mismo jugar en un modelo tan específico como el Andorra de Sarabia a hacerlo en uno con otras funciones y mecanismos como el 4-4-2 de Escribá.
Al Zaragoza aún le falta tiempo de cocción, pero su aroma es bueno. Al equipo se le aprecian intenciones, mecanismos ofensivos bien asimilados (ver primer gol al Cartagena) y una propuesta asentada sobre las esencias y los principios del Zaragoza de la pasada temporada (salidas por fuera, superioridades en sector derecho...). En este sentido, la continuidad de Escribá ha avanzado y acelerado el proceso, y el equipo empieza a enseñar sus primeros brotes verdes.
1. La organización defensiva
El sello de Escribá es indiscutible en el ordenamiento táctico del equipo. ElZaragoza, como el pasado curso, mantiene su precisión en la organización defensiva, las distancias entre líneas y la gestión de los diferentes tipos de presión. El resultado es un colectivo sólido, con aplomo y pocas fisuras. Al que cuesta generarle ocasiones de gol.
2. La segunda línea
Al Zaragoza le faltan aún extremos y puntos de desequilibrio individual, pero sus jugadores de segunda línea han exhibido capacidad para generar situaciones de gol y marcarlos. Es el caso de Maikel Mesa, por ejemplo, autor de tres goles y una asistencia. Un futbolista con mucha dinamita llegando al área. O también Toni Moya, un mediocentro al que su disparo, ejecución del balón parado y dominio de la frontal rival le permiten sumar en ataque. Ellos dos son los fichajes con más luz del verano, junto con el papel dinámico y vertical de Francho.
3. Las variantes ofensivas
La delantera ha pasado de Azón, Giuliano y Gueye a Azón, Bakis y Enrich. La fisonomía y perfiles son muy distintos. El Zaragoza, en este sentido, ha ganado alternativas y variantes. No es lo mismo jugar con un punta más posicional como Bakis a hacerlo con Azón y Enrich, una pareja combativa y dinámica, muy difícil para los centrales rivales. Tanto por calidad como por variedad, a Escribá se le han abierto las posibilidades y mezclas en función de rivales o partidos.
4. Las alternativas en el medio
Si en la delantera Escribá va a tener buen surtido donde elegir, el centro del campo no le va a la zaga. Tiene cinco jugadores para diseñar diferentes fórmulas tácticas en la zona de los mediocentros o en otros sistemas. En este sentido, Escribá, ante la ausencia de extremos, ensayó contra el Cartagena en la primera mitad con un 4-4-2 en rombo. Grau, Aguado, Moya, Francho y Mesa multiplican las variantes y combinaciones. Casi todos han dejado buenas pinceladas.
5. La canter
El aporte de los jugadores canteranos que han completado el grupo ha sido prometedor. El nivel creativo de Pablo Cortes, jugando en banda derecho ha sido muy alto, también la aparición de Juan Sebastián, agresivo y poderoso en el lateral derecho. También Cuenca, Borge, Liso y Chema Aragües han dejado destellos en el verano.
