Alejandro Francés, defensa central del Real Zaragoza e internacional español sub-21, tiene difícil reaparecer el lunes próximo ante el Eibar, justo cuando se cumplirá el mes de baja por una dolorosa y peligrosa lesión en el codo derecho que se produjo en una mala caída ante el Lugo en La Romareda, el pasado día 4 de este septiembre. Casi imposible, aunque se le vea entrenarse con el resto del equipo en los inicios de los entrenamientos de los últimos días (apenas 15 minutos se permiten ver a los medios de comunicación, lo de más sucede bajo el toldo del secreto, según las normas del neofútbol en todos los lares).

El zaguero canterano ha sido ya baja en Ponferrada, en el duelo ante el Sporting de Gijón y el sábado pasado en Miranda de Ebro. En los dos primeros casos no se le echó en falta en demasía, fruto de las brillantes victorias del equipo que elevaron la percepción positiva de las cuestiones globales más allá de las individuales. El último episodio en Anduva, sin embargo, sí que rescató los recordatorios más particulares en la mente de muchos observadores viendo la solvencia de la línea de contención en tan fatal partido del Real Zaragoza más deficiente de lo que va de liga. 

Francés trabaja desde hace 10 días con una órtesis, un apoyo mecánico aplicado a su extremedidad completa que le protege de movimientos anómalos y perjudiciales y facilita la restauración de la lesión. Un problema que fue diagnosticado por los especialistas como una "lesión en el ligamento colateral cubital del codo derecho", según el parte médico que hizo oficial el propio Real Zaragoza el jueves 8 de septiembre, cuatro días después de suceder la acción en el partido ante los lucenses y en el que, al final, se especificaba que los médicos habían "descartado la indicación quirúrgica".

Este jueves, día 29, se cumplirán las tres semanas desde que se le implantó este aparato que le limite parcialmente la movilidad de la articulación. Es el tiempo que se estableció para comprobar cómo evoluciona la dolencia y, si todo va bien, tomar la determinación de quitárselo y que Francés empiece a entrar en el equipo con normalidad. 

Parece extremadamente precipitado que, aun en el mejor de los casos, Francés pueda estar en disposición de jugar el lunes por la noche frente al Eibar. Así que Juan Carlos Carcedo tendrá que seguir manejando la dupla de centrales Lluís López-Jair de los tres últimos duelos, aunque el boliviano Quinteros (ausente en Miranda por estar con su selección en un amistoso ante Senegal) ya volverá a entrar en la convocatoria como alternativa. De cara al partido ante el Oviedo en La Romareda el domingo 9 de octubre, la siguiente cita del calendario tras el Eibar -son dos partidos seguidos en casa-, la vuelta de Francés sí que ganará enteros. 

l