Miguel Linares, el veterano delantero del Real Zaragoza, podría marcharse en los últimos días del mercado estival de fichajes. El punta de Fuentes de Ebro, que el mes que viene cumplirá los 37 años, ya sabe que es una pieza que el entrenador, Víctor Fernández, considera prescindible, dentro de las labores de cierre definitivo de la plantilla que se vienen desarrollando en las últimas horas. Una faena que se acomete con intensidad hasta que el 2 de septiembre se baje la persiana del periodo de contrataciones en el fútbol español. 

Linares mantuvo el sábado una charla vis a vis con Lalo Arantegui, ambos sentados en el banquillo de La Romareda, una hora antes del comienzo del primer partido de liga entre el Real Zaragoza y el Tenerife. El '7' blanquillo no estaba citado por Víctor para el estreno de la competición y vio el evento desde la grada. Lalo, en esos prolegómenos del choque ante los canarios, bajó al césped para buscar esa conversación con Linares.

El fuentero tiene una oferta del Ibiza, equipo de Segunda B propiedad del expresidente del Valencia Amadeo Salvo, que cuenta con dos exzaragocistas y viejos compañeros de Linares en la cantera blanquilla: el director deportivo es Fernando Soriano y el entrenador Pablo Alfaro. En el club ibicenco, emergente en los últimos dos años y con el objetivo de meterse cuanto antes en el fútbol profesional español, está asimismo cedido el brasileño Raí Nascimento, que ya cuajó allí una notable segunda vuelta el año pasado y que ha sido solicitado por los isleños de nuevo para este curso que empieza el próximo fin de semana como puntal importante en la zona de ataque. 

Desde la conclusión de la pretemporada, el plan del técnico del Real Zaragoza para la vanguardia es fichar un delantero con trayectoria en la élite que acompañe a los jóvenes Luis Suárez y Dwamena en el reparto de arietes del remozado equipo blanquillo. Es una de los jugadores que faltan por venir todavía. De este modo, el papel de Linares quedará enormemente disminuido. 

Así pues, además de las salidas programadas de Verdasca y Pombo, que aún faltan por rematar desde la dirección deportiva en los próximos 13 días, cabe introducir en un segundo vagón de posibles marchas de la plantilla al citado Linares y al ecuatoguineano Bikoro. En el caso del africano, la idea inicial de Víctor Fernández era la de cederlo a un equipo de Segunda B donde observar su evolución jugando partidos cada fin de semana. El club, una vez concluida la pretemporada, no se ha pronunciado oficialmente al respecto. Y Bikoro, como era más que previsible, fue otro de los descartados por Víctor ante el Tenerife el pasado fin de semana. 

Linares fue un fichaje de emergencia del Real Zaragoza el pasado mes de enero. El delantero aragonés estaba libre tras consumarse la desaparición y descenso fulminante del Reus a mitad de campaña por irregularidades societarias. Con el cuadro zaragocista metido en zona de descenso a Segunda B por aquel entonces y sin apenas liquidez ni límite salarial para reforzarse, el club acudió a la contratación de dos excanteranos, ambos con 36 años. Uno fue el central Dorado (vino del Rayo Vallecano y se ha ido al Ejea de Segunda B) y el otro, Linares, al que -a diferencia de Dorado- se le concedió un año más de contrato (el actual) en el momento de aquella operación. 

Miguel Linares acabó jugando en 13 partidos de la segunda vuelta, anotando 2 goles (en Lugo y al Elche en Zaragoza, ambos tantos ganadores). Sumó 566 minutos, pues solo completó los 90 minutos en 2 ocasiones, siendo titular en 6 jornadas.