Acaso uno de los fundamentos básicos de la felicidad reside en disfrutar de cada instante de la vida. Este domingo, el Real Zaragoza le regaló cuatro motivos para ser feliz a Natxo González en forma de goles. O tres en forma de puntos. O 24.000 en forma de corazones en La Romareda. Desde luego, le sobraban los motivos al técnico para destilar felicidad nada más concluir el encuentro. "Estamos jugándonos algo bonito y disfrutando de este momento", enfatizó Natxo González. "Una de las claves es cómo estamos entrando en los partidos, poniéndonos por delante con gran juego en muchos momentos. A partir de esa situación, hemos gestionado mejor el segundo tiempo con el marcador a favor, algo que teníamos que corregir respecto al día contra el Gijón. Hemos hecho un partido bastante completo", subrayó el gestor de recursos humanos del Real Zaragoza.

Dentro del enorme esfuerzo grupal, Natxo destacó el aporte de Giorgi Papunashvili. "Papu venía trabajando muy bien. Necesitaba tiempo de adaptación. No teníamos ninguna duda de lo que nos da: desequilibrio, piernas frescas en esta recta final de la competición", destacó. También hubo un apartado para Alberto Benito y Borja Iglesias. "Si ha jugado, es que podía hacerlo. Faltando Julián Delmás, había que forzar", verbalizó en relación al lateral. "Teníamos que evitar el cuerpo a cuerpo, que te presionaran de espaldas en el uno a uno. Generar los espacios para correr de cara, y lo hemos hecho bastante bien", explicó en relación al ariete.

Enrique Martín Monreal también se mostró sincero, aunque ayer la felicidad no fuera con él ni con el marcador de su Albacete. "Ellos han tenido cinco tiros y han metido cuatro goles. Nosotros también cinco y solo uno. Hemos tirado en total 19 veces a puerta. Su portero ha estado en la gran linea que viene jugando. Tienen un pedazo de portero que les ha dado mucho. Hemos pasado de un posible 3-2 a 4-1, pero la realidad es la que es. El domingo tenemos que ganar. Jugamos en casa, necesitamos el apoyo de nuestra gente", concluyó el técnico navarro.