Natxo: "Estamos recogiendo lo que hemos sembrado"

El Real Zaragoza le ha puesto velocidad de crucero y toma posiciones para el asalto a las plazas de promoción. La vida le ha cambiado al equipo y el fútbol alimenta de razones estos días a Natxo González. El entrenador, aun en los peores momentos, cuando casi nadie creía en él y mucho menos en sus jugadores, siempre mantuvo un discurso creyente, sereno y paciente. Él, tras la victoria contra el Real Oviedo ayer en La Romareda -cuarta consecutiva en casa-, lo explicó de tal modo, con un preciso símil que resumen las causas y consecuencias de este Real Zaragoza revivido, estimulado, confiante y con un apetito voraz. Un Zaragoza que ya es el mejor equipo de la categoría en la segunda vuelta. "Estamos recogiendo lo que hemos sembrado en esos días de tempestad. Vamos recogiendo esos frutos. Ya tocaba. Los chicos merecían sonreír porque se lo están currando mucho. Esta semana les felicitaba por salir de una dinámica inquietante. Además, hemos salido de ella con toda la naturalidad del mundo", relató Natxo González en su rueda de prensa posterior al partido.

El Zaragoza se ha puesto a solo cuatro puntos de la zona de promoción. En menos de un mes, ha abierto una brecha con la tierra peligros de la tabla de 11 puntos. Su objetivo, a falta de 14 jornadas todavía (justo un tercio de Liga), comienza a definirse. El equipo aragonés está a tiempo de todo. Su entrenador destacó, en este mosaico de datos, el aspecto clave a la hora de construirse un rendimiento estable y regular: fortalecerse en casa. "Es nuestra cuarta victoria consecutiva en casa. Es importante dar continuidad a la fiabilidad como locales. El primer objetivo era alejarnos de la zona caliente y en eso estamos ahora mismo. Cuanto más te alejes de abajo, más te acercas arriba. No disfrutar tanto la victoria, desde mi disposición es más bien analizarla", indicó.

Natxo apuntó los pilares de la victoria contra el Oviedo, una victoria de prestigio, frente a un rival de cierto tamaño, fuerte en defensa, en los duelos, competitivo y llamado a estar arriba. "La palabra clave es la madurez. No desesperarnos. Sabíamos que iba a ser un partido muy cerrado. A ellos es muy difícil entrarles, en cualquier acción te generan peligro. Había que trabajar el partido e ir desgastándoles. Si les hacíamos correr, el desgaste nos iba a dar opciones".

El entrenador del conjunto aragonés también celebró la mejora defensiva del Real Zaragoza. Ayer, su equipo rozó una nueva portería a cero. En las últimas cinco jornadas solo ha encajado dos goles. Unos números que han disparado su eficacia y su rendimiento. "Siempre hacemos diagnósticos de la situación del equipo. Nos decíamos que teníamos que mejorar a nivel defensivo, minimizar las ocasiones del rival. Hoy -por este domingo-, pocas recuerdo. Hemos dado sensación de consistencia y nos gusta".

Por su parte, Juan Antonio Anquela, entrenador del Real Oviedo, resaltó el nivel de su rival y advierte de su progresión: "El Zaragoza sabe lo que quiere, es un equipo experto y competitivo que está cogiendo una buena dinámica".

El técnico del Oviedo analizó el encuentro: "Fue un partido abierto, impreciso, con poca calidad. Lo teníamos bien controlado pero en una acción que sabíamos que podía pasar nos hicieron el primero. Después nos metieron el segundo y así es imposible. Intentamos reaccionar, tenemos carácter y eso es importante", apuntó.

Anquela prosiguió: "Nos falta frescura técnica, no es una cuestión física. Fallamos pases claros. Físicamente el equipo está impresionante. Vamos y vamos hasta el último segundo. No he engañado nunca a nadie. Tenemos nuestras carencias y virtudes. Si las carencias se imponen no ganamos".