El Real Zaragoza ha perfilado en la mañana del Sábado Santo, bajo un intenso sol primaveral, los últimos detalles previos al crucial partido -otro más- de este domingo en La Romareda ante el Girona (17.00, ya con el nuevo horario de verano instaurado). El regreso de Cabrera al eje de la defensa, tras dos semanas de baja por una dolencia muscular, y la entrada en el medio campo del filial Tarsi en el puesto del también lesionado Morán, asoman como dos cambios relevantes en el once inicial de Lluís Carreras en este nuevo episodio liguero. Además, la vuelta a la normalidad de Lanzarote, que no viajó a Canarias el pasado fin de semana aquejado de un proceso vírico que le ocasionó una inoportuna fiebre, reabre la eterna duda sobre quiénes van a ser los dos extremos ante los gerundenses -en competencia permanente con Hinestroza y Pedro- por lo que, de recuperar Lanzarote la titularidad, sería la tercera modificación en el equipo que arranque el duelo ante el rival catalán.

Carreras, en su anticipada -por las fiestas de Semana Santa- comparecencia semanal previa al partido, sugirió el pasado jueves que Cabrera "ya está muy bien" para recuperar su puesto fijo como central y abrió las puertas a Tarsi para que ocupe el vital puesto de pivote central, para el que Dorca también se postula. "A Dorca lo veo como interior izquierda, que es su posición", subrayó Carreras en un mensaje directo respecto de las necesidades que concurren ahora mismo en el Real Zaragoza por la baja de Morán para los próximos partidos. El técnico barcelonés, además, ya tuvo que despejar esta misma disyuntiva hace dos meses en Almería, donde el lesionado centrocampista vasco estuvo ausente por acumulación de tarjetas amarillas. Y allí ya se decantó por la opción de Tarsi, un futbolista que encaja bien en su filosofía táctica como responsable técnico del cuadro zaragocista.

Por otra parte, la posible reincorporación de Lanzarote al once base deriva, un día más, en medir con buen criterio cuál de los otros dos hombres ofensivos de banda, Hinestroza y Pedro, se queda en el banquillo como revulsivo con el partido en marcha, según evolucione el marcador y el devenir del juego. En este caso, Carreras lo ha probado todo. También dejar al propio Lanzarote como suplente, como hizo en Vitoria. El entrenador zaragocista, estudioso al milímetro de las características de los adversarios, también sustentará su decisión final en este asunto en virtud del perfil que ofrece el Girona de Pablo Machín, un equipo habituado a jugar con tres centrales y dos laterales de largo recorrido que, obviamente, modifica el rol de los extremos del Zaragoza al tener en frente una línea de contención fuera de lo que es ordinario cada fin de semana.

De acuerdo a todas estas modificaciones en el rostro del Real Zaragoza ante el Girona, se cae con total seguridad del último once en Tenerife el lastimado Morán y podrían quedarse fuera del equipo inicial Abraham -Rico volvería al lateral izquierdo- y, de entrar Lanzarote, también pasarían al banquillo bien Pedro o bien Hinestroza.

Del resto de jugadores, destaca la ausencia del portero Bono, habitual suplente desde hace ocho semanas, que juega hoy con su selección, Marruecos, en Cabo Verde, hecho que asegura la convocatoria para el banquillo del zaragozano Alcolea para acompañar al titular en los palos, Manu Herrera. Asimismo, Guitián ha mostrado en el último entrenamiento de este sábado su buen tono tras haber atravesado un par de días con síntomas gripales y, en principio, no se teme por su baja. Por último, la presencia en el grupo de Vallejo y Ortí, ausentes en las últimas semanas por sendas lesiones que han necesitado un tiempo prudencial de rehabilitación, aumenta los efectivos útiles para Carreras.