Leandro Cabrera no viajará el viernes a Tenerife. El central uruguayo, que ya se perdió el pasado domingo el choque ante el Albacete por una lesión en la zona inguinal sufrida en el último entrenamiento de la pasada semana, no trabaja con el equipo y está siendo tratado de forma personalizada por los fisioterapeutas y los recuperadoras del Real Zaragoza.

En principio, la "entesopatía insercional en el aductor de la pierna izquierda" que padece Cabrera no es una dolencia grave, pero sí que resulta molesta para cualquier futbolista y, de no curarse convenientemente, podría ser origen de una rotura de mayor importancia. Por ello, el defensor charrúa está descartado para el viaje a Canarias y todos los esfuerzos médicos se centran en intentar que pueda reaparecer la semana próxima en el partido ante el Girona que se jugará el Domingo de Resurrección en La Romareda.

Cabrera tiene afectada la zona en la que el músculo inguinal se une al hueso (pelvis), por lo que tiene dificultades para correr, saltar y golpear la pelota. Unos días de reposo, de radioterapia y de fisioterapia específica deberían ser suficientes para que el daño desapareciera. Mientras tanto, Lluís Carreras deberá buscar sustituto al zaguero más regular, junto con Rico, en la aportación de minutos y rendimiento en la línea defensiva del Real Zaragzoa.