“Los jugadores están tocados y la sensación hoy era de tristeza, pero queda la segunda parte de la eliminatoria. Hay que levantarse e intentar repetir la imagen y la actitud para terminar de la mejor forma posible”, ha señalado en rueda de prensa Ranko Popovic, y ha recordado que “Zaragoza nunca se rinde” y que se debe viajar a Girona con el “espíritu del Liverpool” en la épica remontada en la final de la Champions League 2004-2005 ante el Milan.

Así, asegura que ve a sus jugadores “deseosos de que llegue el partido del domingo” para intentar darle la vuelta al marcador y, aunque no ha querido dar falsas esperanzas, sí ha dejado claro que su equipo “irá a Girona a ganar” y que si los futbolistas entran al terreno de juego con las mismas ganas que este jueves, “todo es posible”.

En referencia a por qué el equipo no ha dado tan buena imagen durante toda la temporada, Popovic ha recordado que sí han habido partidos comparables, pero que la “memoria es muy corta”. Además, ha dado un toque a la afición, comentando que “ellos en partidos anteriores también han dado otra imagen, pitando después de los fallos o de algunos cambios” y ha invitado a pensar la influencia en la actitud de los jugadores sobre el césped: “Nos podemos preguntar si era por eso”. También ha agradecido que La Romareda despidiera al equipo con aplausos a pesar de la dura derrota, algo que “pocas veces habrá sucedido” y que considera fundamental para los intereses del equipo, porque indica que “algo ha cambiado”.

También ha tenido palabras de apoyo para Whalley, tras su decisivo error: “Tiene 20 años y errores como ese los cometen porteros de la talla de Barthez o Neuer. Los fallos de los porteros se ven más que los de los delanteros. Tiene que seguir y estoy seguro de que esto le servirá para el futuro”.

Sobre la posibilidad de recuperar algunos jugadores lesionados, el serbio se ha mostrado cauto: “Hay que esperar al entrenamiento de mañana. Jaime hoy ha entrenado por primera vez, Borja está muy complicado que llegue... Hay que esperar hasta el último momento para ver qué decidimos con ellos”.

Para concluir, ha insistido en que, estén los jugadores que estén, “el equipo tiene que levantarse y tratar de volver a anular a un equipo de la talla del Girona como se hiciera este jueves durante la primera parte” y ha expresado su deseo de se volviera a jugar otro encuentro en La Romareda “por todo el zaragocismo”.