Un plan B para la defensa

Víctor Muñoz ensaya con dos líneas defensivas diferentes, una por si juega Mario y otra por si no lo hace.

Diogo podría debutar como titular en el lateral derecho
Un plan B para la defensa
A. Alcorta

El regreso de Mario a la alineación del Real Zaragoza casi se da por hecho después de que este miércoles se entrenara con aparente normalidad, pero Víctor Muñoz quiere cubrirse las espaldas. Primero, por si el central vuelve a sufrir dolores en el pubis durante los entrenamientos que quedan hasta el domingo y, segundo, por si vuelve a sentir molestias durante el duro encuentro que se prevé el próximo domingo (20.00) ante el Betis.


El entrenador del Real Zaragoza ha ensayado, por si acaso, con dos líneas defensivas distintas. Sin Vallejo, convocado por la selección sub-19 para un torneo en Grecia y puede que sin José Fernández, que fue expulsado frente al Sporting, Víctor ha probado casi todas sus opciones. En principio, el lateral derecho deberá cumplir la sanción, ya que el Comité de Competición ha desestimado las alegaciones del club aragonés, aunque tiene previsto recurrir ante Apelación. Si está, Víctor Muñoz tendría una alternativa más, pero si no sería Diogo el que ocuparía la banda diestra.


Dando por válido ese supuesto, Rubén y Cabrera tendrían asegurado un puesto en la zaga, aunque la posición del segundo variaría en función de la presencia o no en el once de Mario Abrante. Si puede jugar de inicio, como todo el mundo espera, formaría pareja con su excompañero en el Baku de Azerbaiyán y el 'Lele' Cabrera jugaría en la posición en la que se ha ganado la titularidad, el lateral izquierdo. Por lo tanto, la defensa la formarían Diogo, Mario, Rubén y Cabrera.


Si algo falla, y por fallo se entiende que no pueda jugar Mario, Cabrera pasaría al centro de la zaga, junto a Rubén, y sería Rico el que regresaría al lateral izquierdo. Por lo tanto, jugarían Diogo, Rubén, Cabrera y Rico. Este ensayo también es válido para otros imprevistos, como una posible lesión o expulsión de cualquiera de los dos centrales, lo que obligaría al técnico a recomponer la defensa dando entrada al burgalés y desplazando al uruguayo hacia el centro, en la que era su posición natural.