Sin delanteros puros en el primer equipo, Víctor Muñoz busca soluciones en casa a la lógica falta de gol. El o los puntas deberían llegar en los próximos días, pero es probable que el próximo sábado (19.00), frente a Osasuna, el técnico tenga que volver a recurrir a un once improvisado, sobre todo en ataque. 

En el primer partido, contra el Recre, Víctor echó mano del joven David Muñoz, que debutaba con el primer equipo en partido oficial, con Adán por detrás y Álamo y Pedro por las bandas. El Real Zaragoza generó ocasiones, y a punto estuvo de marcar varias veces, pero nadie fue capaz de mover el marcador.

Sin embargo, Víctor sabe que este sábado necesitará más pólvora para vencer al equipo navarro, que nunca le pone las cosas fáciles al Real Zaragoza, y este lunes ha hecho trabajar más a sus atacantes. Cuando ha finalizado el entrenamiento, el técnico ha reunido a los jugadores de ataque (Muñoz, Álamo, Adán, Jaime, Porcar, Pedro...) para tratar de mejorar la definición en los últimos metros.

Uno a uno, los futbolistas han ido rematando los balones que el propio Víctor Muñoz les servía, hasta que éste ha quedado satisfecho con el resultado. Salvo que alguno de los delanteros con los que el Real Zaragoza esté negociando llegue en las próximas horas, lo lógico es que el entrenador cuente con los mismos jugadores de ataque que jugaron en el Nuevo Colombino, por lo que deberá repetir estrategia, con Muñoz en punta, o introducir alguna variante, como un falso nueve, con Adán o Jaime adelantados.