¿Acertó con su cambio de vida?

Siento que ambas determinaciones, la de seguir compaginando el atletismo con el fútbol o la de decantarme definitivamente por este último deporte, podrían haber sido acertadas. Tomé el camino del fútbol y, casi un año después y con todo lo que he vivido, puedo decir que estoy feliz con lo escogido.

¿Cómo valora su primera temporada en el Barça?

De forma positiva. Fue un salto grande y al principio, debido a que era la primera vez que me dedicaba a un solo deporte, me costó un poco. Ahora, pasados unos meses, estoy más satisfecha con el rendimiento que vengo ofreciendo tanto a nivel individual como en lo colectivo.

¿Qué diferencia al Barça del resto de clubes?

Principalmente, la profesionalidad en todos los niveles. Las jugadoras tenemos todo tipo de facilidades para poder dar lo mejor de nosotras en el terreno de juego. En mi caso, tengo la suerte de entrenar por las mañanas y poder seguir estudiando en la misma Ciudad Deportiva por las tardes.

Os vienen retos importantes en este tramo final de temporada. Puede ser otro año histórico para la sección.

Sí, hasta ahora la temporada con el Barça está siendo muy buena. Ya ganamos el primer título, la Supercopa, tenemos la Liga muy cerca y hemos conseguido volver a clasificarnos para las semifinales de la Champions League. Estamos con muchas ganas de terminar bien el curso, consiguiendo los objetivos que nos faltan y que nos hemos marcado.

En Barcelona coincide con otra aragonesa, Mapi León. ¿Cómo es su relación?

Muy buena. Para mí es un privilegio jugar a su lado y aprender cada día, tanto en los entrenamientos como en los partidos, de una de las mejores jugadoras.

Salma y Mapi son las grandes abanderadas del fútbol femenino aragonés. ¿Qué se siente al ser las referentes de tantas y tantas niñas?

Orgullo. Me honra que se nos utilice como espejo, pero siempre tengo muy presente de dónde vengo. El hecho de que ahora seamos referentes de las niñas que vienen por detrás y sueñan con ser futbolistas también representa una motivación hacia el futuro.

En 2022, tras ganar el Mundial sub-20, llegó a sonar como posible pregonera de las fiestas del Pilar.

Sí, en su momento ya dije que hubiese significado un honor. Para mí son muy importantes las raíces y ser reconocida en mi tierra.

Después de perderse la Eurocopa del año pasado por lesión, este verano tendrá la oportunidad de estrenarse en un Mundial con la absoluta. ¿Qué significa esta cita?

Nadie puede negar que un Mundial representa lo máximo para cualquier deportista, pero todavía falta mucho –arrancará a mediados del mes de julio– y ahora mismo estoy centrada en terminar bien la temporada con el Barça y conseguir ganarme un puesto en ese torneo.

Usted es considerada una de las jugadoras con mayor progresión del panorama futbolístico. ¿Dónde está tu techo?

Ahora mismo no quiero marcarme límites. Todavía tengo 19 años y, aunque considero que estoy en el lugar correcto para seguir creciendo, prefiero no establecerme un techo que pueda presionarme.

¿Se ve capaz de marcar una época en el deporte aragonés?

Como decía anteriormente, prefiero ir paso a paso. Todavía soy muy joven y me quedan muchos retos por alcanzar. Ojalá algún día pueda decir que he firmado una carrera repleta de éxitos como la de los principales referentes del deporte de nuestra comunidad.