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¡Bravo, Teruel!

Un técnico debutante, Víctor Bravo, apadrina el ascenso turolense a Segunda B

Los jugadores del CD Teruel celebrando el ascenso
Los jugadores del CD Teruel celebrando el ascenso
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Bravo, Teruel. Bravo, Víctor Bravo. El ascenso del Teruel a la Segunda División, consumado el pasado domingo con un empate en Utebo, lo ha abanderado su entrenador, el exjugador Víctor Bravo, que se ha estrenado a lo grande como técnico. Víctor Bravo (Zaragoza, 1983), futbolista de talento extraordinario, brilló en el Stadium Casablanca y firmó por el Barça juvenil. Allí coincidió con Albert Dorca, el hombre que estrelló contra el larguero el ascenso del Real Zaragoza a Primera en Las Palmas.

 Abandonó La Masía para iniciar un largo camino de 17 años por el fútbol español. Pasó por Calahorra, Huesca, Burgos, ¡Atlético de Madrid!, Mérida, Tenerife, Pontevedra, Melilla… Se acercó a Aragón firmando por el Tudelano. También militó en el Ebro, hasta retirarse el pasado curso en el Teruel tras caer lesionado. Fran Gracia, director deportivo del Teruel, pensó en él para regresar a la Segunda B. Valoró Fran Gracia el dominio del grupo ejercido por Bravo ya como jugador, su apuesta por un fútbol atractivo, sus ansias de alcanzar en el banquillo los éxitos logrados anteriormente como futbolista.

Así comenzó a construir un equipo del que no todos en la Tercera estaban seguros de su solvencia. Los resultados le han dado la razón al ideario de Víctor Bravo, que entrenará en Segunda B porque ha sabido ascender a Segunda B. Seguros de sí mismos desde el arranque liguero, ya estuvieron a punto de obrar la gesta en la Copa del Rey, donde fueron eliminados por el Rayo Vallecano en un choque en el que el Teruel se lo puso dificilísimo (2-3). De vuelta a la liga, el Teruel comenzó a marcar distancias desde el inicio.

Por eso alcanzó el ascenso con tanta holgura, no por la supuesta vulnerabilidad del resto, hipótesis esta última alejada de la realidad. Evidentemente, si el RZD Aragón no se ha metido en la criba final por el ascenso, es porque hay al menos otros seis grandes equipos en la Tercera aragonesa. Qué decir del Huesca B de Dani Aso, este domingo superado por el Cuarte de Richi Gil. O del Brea de Raúl Jardiel, o el Utebo de Rubén Zapater, qué decir del Belchite de Juan González… Mucho mérito todos. Mucho mérito del Teruel.

Consumado el ascenso llega, ahora el momento de la consolidación. El Teruel, equipo ascensor en Tercera y descensor en Segunda B, persigue asentarse en la categoría en que quiere militar. Ramón Navarro, un hombre bueno al frente del club, y Fran Gracia, un director deportivo siempre despierto, apostarán por Víctor Bravo, el hombre que con tanta autoridad ha conducido el esperado ascenso.

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