Bilbao quiere volver a ser de Champions

El Athletic confía en el poder de su nuevo estadio para colarse hoy (20.45) entre los mejores de Europa.

«Es nuestra final», resume Ernesto Valverde. 16 años lleva el Athletic y todo Bilbao esperando este partido. Mucho ha cambiado desde aquella ‘Champions Luis’ lograda en el año del centenario con el ‘machote’ de Tarifa.


El Nápoles es el último obstáculo para entrar en la fase de grupos de la Liga de Campeones. Gracias al gol de Iker Muniain en Sao Paolo al Athletic le sirve hasta empatar sin goles. «El 1-1 no puede llevarnos a creer que tenemos algo hecho. Si pensamos en ello seguro que te acaban marcando» reitera Txingurri.


El entrenador es consciente de la ilusión existente por estrenar el nuevo estadio, con las cuatro tribunas terminadas, en Europa. No quiso hablar del posible once porque explicó que hay algún futbolista tocado, como el lateral Balenziaga, pero en principio apenas se espera un cambio respecto al duelo de la ida, ya que desde el retorno de Valverde el equipo tiene las ideas muy claras y confiará en el bloque que tanto brilló en el curso anterior.


El último tanto en Europa del viejo coliseo lo marcó Aduriz, único jugador con experiencia en la Champions League de la plantilla vasca, y el delantero quiere repetir dejando claro que habrá que buscar la meta de Rafael. «Con este tipo de equipo es complicado creer que valdrá con un 0-0. Habrá que controlar la tensión. En Nápoles los primeros minutos estuvimos cogiendo el sitio. Es un partido extraordinario y todavía puede ser mejor si conseguimos pasar. Siempre que nos hemos enfrentado a partidos de este tipo el equipo ha respondido y no tengo dudas de que responderá para bien». El pichichi rojiblanco espera que sea el Athletic el primero en inaugurar el marcador: «La importancia de marcar primero es un factor a tener en cuenta y determinante».


Por su parte, el Nápoles, campeón de la Copa italiana la temporada pasada, también apostará por buscar el triunfo desde el inicio. Tras su buena segunda parte en la ida, el belga Mertens será titular por Insigne y será, junto a Ghoulam e Inler por Britos y Gargano, uno de los tres cambios respecto a hace una semana.


El ambiente en el nuevo San Mamés para el histórico partido se presume de gala. 50.000 seguidores harán de las gradas un hervidero de estreno.