El Bada Huesca, a reencontrarse con la victoria en Cangas del Morrazo

No termina de ser justo el balonmano con el Bada Huesca en las últimas jornadas. Las tres derrotas y un empate en cuatro partidos esconden un nivel competitivo que le ha dado opciones de victoria en todos ellos. También, el miércoles pasado ante el Ademar León (26-29), y los de José Francisco Nolasco disponen de una oportunidad inmediata para resarcirse este domingo en la cancha del Frigoríficos del Morrazo Cangas (18.30, LaLiga +). En este marco, una derrota sí complicaría la situación de los oscenses en la tabla, por lo que la búsqueda de los dos puntos también se presenta como imperativo.

Por ello, el entrenador tiene una espina clavada que quiere sacarse en O Gatañal, un pabellón ya clásico de la Liga Asobal, un pista complicada y ruidosa amén de un viaje muy largo. “Los errores nos marcaron el otro día, no lo controlamos. Si quieres competir contra buenos equipos, te matan. Si a eso le unes 20 lanzamientos fallados, es imposible. Y aún así, estuvimos en el partido”, recordaba el ilicitano, que pide “autocrítica” con el convencimiento de que “podemos ganar a cualquiera, pero hemos de hacerlo mejor todavía”.

Lo importante para el Bada es adquirir conciencia de que “el balón ha de ser nuestro y generar siempre una ocasión de gol”, desechando “errores infantiles y sencillos que no se pueden dar en un equipo profesional”. Los rojillos esperan una versión más completa de los internacionales convocados durante el parón de la semana pasada por sus selecciones -Frank Cordiés, Leo Terçariol y Danilo Osadchyi-, con más posibilidades de rotación y “jugadores importantes más frescos”.

El Cangas destaca por su “personalidad” y el “lanzamiento exterior”, con un viejo conocido en sus filas: el rumano Rares Fodorean. Destacan sus laterales, y “todo está guiado por un jugador como Juan del Arco, con una calidad tremenda para definir partidos”. En su contra juega la dependencia de jugadores específicos que provoca, a su vez, que el cansancio les haga mella para regocijo del rival de turno. “Podemos hacer más rotaciones y con mayor intensidad para beneficiarnos de esto si les desgastamos bien”, anunciaba Nolasco.