Suma y sigue. El Club Balonmano Huesca y Oier García han llegado a un acuerdo, por lo que el extremo izquierdo seguirá a las órdenes del técnico José Francisco Nolasco al menos una temporada más. Se mantiene así en un proyecto continuista que suma ya 15 jugadores y una núnica cara nueva, la del portero portugués Miguel Espinha. A falta de que se termine de concretar la primera línea, el club oscense se ha movido rápido para atar el plantel que le permita competir con garantías durante el curso 2020-21 en la Liga Asobal.

El extremo izquierdo, que llegó en 2015 procedente del Barakaldo, cumplirá su sexta temporada en Huesca y se convertirá en uno de los jugadores más veteranos dentro del vestuario, donde es también una pieza muy importante. Cerró la pasada temporada participando en 19 partidos y aportando 36 goles.

Se une Oier García a los porteros Dani Arguillas, Miguel Espinha y Jorge Broto; al primera línea Sasha Tioumentsev, los extremos Adrià Pérez y Gerard Carmona, los laterales Alex Marcelo, Álvaro del Valle, Asier Nieto y Joao Pinto, los centrales Sergio Pérez y Miguel Malo y los pivotes Iván Montoya y Rodrigo Benites. Falta por aclarar la situación de Marco Mira para cerrar el capítulo de continuidades y descartes.

El Bada Huesca afrontará la décima campaña consecutiva en la máxima categoría del balonmano nacional de nuevo a las órdenes de José Francisco Nolasco, a la expectativa de seguir recabando apoyos económicos y en un nuevo formato de 18 clubes, con roces entre los equipos y la Asobal para su concepción definitiva tras no tener lugar descensos y las novedades del Club Cisne Balonmano y Villa de Aranda. Habrá, así, cuatro descensos para recuperar en la 21-22 el modelo habitual de 16 contendientes.