La cuenta atrás para el regreso de la Asobal ha comenzado. El Bada Huesca afronta este sábado su último amistoso antes de que el próximo 3 de febrero retome la competición oficial visitando al Frigoríficos Morrazo. A partir de las 19.30, en la localidad navarra de Noain, se cruzará con el Anaitasuna, conjunto al que en la primera vuelta derrotó a domicilio por 23-27.

Para los del técnico José Nolasco, el duelo supone la oportunidad de cerrar el parón invernal, propiciado por la disputa del Mundial, con un resultado positivo después de que no haya podido imponerse en ninguno de sus tres encuentros de preparación previos. En el torneo en el que tomó parte en Francia entre el viernes y el domingo pasado cayó por 28-23 con el Chambery y por 26-14 ante el Dunkerque; en ambos los altoaragoneses acusaron la falta de ritmo de competición, especialmente en el segundo. Ya el miércoles, se vio las caras con el Guadalajara en un duelo en el que el resultado fue de 27-25. Las sensaciones fueron mejores que en tierras galas, aunque se acabaron diluyendo al final después de haber mandado durante muchos minutos en el marcador.

Los navarros se presentarán con el mismo objetivo. El Anaitasuna tampoco conoce la victoria desde que volvió a los entrenamientos tras las vacaciones de Navidad. El sábado pasado fue derrotado por el Logroño con un 21-25 y antes había empatado con el Billere francés a 26.

Una de las novedades en las filas oscenses será la del lateral Nico Bonanno. El argentino ha regresado esta semana tras su participación en el Mundial con su selección, con la que concluyó en 17ª posición. El miércoles guardó fiesta, el jueves se incorporó al trabajo con el resto de sus compañeros y en Noain estará a disposición de su entrenador.