Willy Villar siempre tiene un as en la manga. El director deportivo del CAI Zaragoza es un experto en lograr ingresos para el club: con sus jugadores, con los ex y con los que ni siquiera han llegado a vestir la camiseta rojilla. Las últimas jugadas maestras fueron la del Adetokunbo, que se marchó a la NBA sin llegar a debutar con el CAI y dejó unos importantes ingresos, o la de Shermadini, vendido a mitad de temporada al club que le había dejado marchar libre el verano anterior.

Este verano, una vía de recaudación podría ser la de Goluvobic, pívot serbio de nacimiento y con nacionalidad montenegrina que jugó el último tramo de la temporada 2012/13 en el conjunto aragonés. El jugador disputó ocho partidos a las órdenes de José Luis Abós, firmando unas medias de 10,5 puntos, 5 rebotes y 15,5 de valoración en los dos encuentros de liga y 6,7 puntos, 6 rebotes y 6,7 de valoración en los seis de 'play off', tres frente al Valencia Basket y otros tres frente al Real Madrid.

Una vez finalizada la campaña, el pívot -de 28 años y 2,12 metros de altura- se marchó al Aykon TED Kolejliler Ankara de Turquía, donde ha promediado la friolera de 19,3 puntos y 10,1 rebotes por partido en la Eurocup. El CAI Zaragoza intentó que se quedara y le presentó una oferta cualificada, por lo que a pesar de su salida, se reservó sus derechos en la ACB.

Este movimiento permitiría al club aragonés acudir al derecho de tanteo para igualar la oferta del Unicaja y quedarse al pívot o negociar con el conjunto andaluz una compensación económica a cambio de renunciar al jugador. Este lunes, y pese a que todavía depende de la decisión del CAI -con el que no se han puesto en contacto-, el Unicaja ha anunciado el fichaje del jugador.

Dado que el salario de Golobovic es inasumible para la entidad zaragozana, la intención es recibir una compensación, algo parecido a lo que ocurrió el año pasado con Van Rossom y su traspaso al Valencia Basket, que dejó alrededor de 80.000 euros en las arcas de la entidad aragonesa.