De dar positivo en marihuana a nueva reina de la velocidad

La estadounidense gana la final de 100 metros por la calle nueve, acaba con la hegemonía jamaicana y demuestra que ha dejado atrás sus problemas.

Sha'carri Richardson.
Sha'carri Richardson.
FABRIZIO BENSCH

Estados Unidos ya tiene a su reina de la velocidad y una de esas historias de regreso que tanto gustan en el deporte. Sha'Carri Richardson llevaba un camino dudoso y cuando quedó fuera de los Juegos de Tokio tras dar positivo por cannabis, tocó fondo. Pero dos años después, es una velocista centrada en explotar su enorme talento. «Quiero mostrar que sigo siendo yo, pero mejor, más fuerte, más madura», dijo antes del Mundial de Budapest. Y vaya si lo ha confirmado. En una final espectacular, por la calle nueve tras una semifinal accidentada y clasificarse por tiempos para la final, Richardson corrió a su aire, sin importarle las rivales, para pulverizar sin inmutarse el dominio que ejercían durante las dos últimas décadas las atletas jamaicanas. Sólo Carmelita Jeter en 2011 y la malograda Tori Bowie en 2017 habían podido colarse en una lista de éxitos jamaicanos desde 2007.

Anoche, Sha'Carry Richardson, un talento descomunal de 1,55 de altura y 23 años, levantó a Shericka Jackson y a Shelly Ann Fraser Price la final en un segundo sector de los cien metros asombroso. A su favor estuvo que mejoró la desastrosa salida que firmó en semifinales, lo que le permitió tomar velocidad a partir de los 40-50 metros. Pero fue en los últimos 30 donde fue imparable. Mientras las jamaicanas debatían por su supremacía, la estadunidense pasó a la cabeza para ganar con 10.65 y viento de -0'2, es decir, un marcón.

Richardson y Lyles han devuelto la felicidad a Estados Unidos, que firma un doblete en su prueba predilecta de los 100 metros que no sucedía desde 2017, cuando Justin Gatlin ganó el oro en Londres, y es la segunda ocasión que sucede en un Mundial de atletismo desde 2005.

Todo en ella es llamativo

Sha'Carri lo tiene todo para convertirse en un fenómeno del atletismo, no solo por ese talento que demostró anoche, sino por su actitud y su estilo que ya la conveirtieron en un fenómeno viral cuando se dio a conocer. Sus largas uñas de colores que recuerdan a las de Florence Griffith, sus pelucas como las de la jamaicana Fraser-Price -aunque anoche no las utilizó-, sus tatuajes... Todo en ella es llamativo, como su complicada historia de dura infancia, cuando fue abandonada por su madre de pequeña e intentó suicidarse siendo una adolescente.

Su salud mental es algo sobre lo que sigue trabajando con la ayuda de un terapeuta. «Solo mi familia y mi entrenador saben por lo que paso en el día a día. Les estoy muy agradecida. Sin ellos, no habría yo. Sin mi abuela, no habría Sha'Carri Richardson», declaró meses atrás. Aquella sanción que recibió antes de los Juegos y que le impidió correr en Tokio se produjo tras otro episodio de depresión tras el fallecimiento de su madre. Pero ahora a Sha'Carri le toca ser feliz y aprovechar esta segunda oportunidad que le ha dado el atletismo para ser la reina de la velocidad.

En vallas

Grant Holloway, por su parte, vuela sobre las vallas para lograr su tercer oro mundial

Uno, dos y tres. Grant Holloway cuenta con sus dedos los títulos mundiales que ha logrado y que le mantienen como el rey de las vallas. El estadounidense arrolló en la final de los 110 metros con una carrera perfecta, sin tocar ni un obstáculo, para ganar su tercer oro consecutivo -Doha, Eugene y Budapest-. Solo Hansle Parchment tuvo el valor de superarle en la final de los Juegos Olímpicos de Tokio, pero el estadounidense supo reaccionar para encadenar dos nuevos títulos y demostrar en Budapest que no tiene rival. Muy superior desde la salida, el vallista de Virginia se impuso con 12.96, mientras la plata fue para Parchment, con 13.07, y el bronce para Roberts, que firmó un 13.09.

Se echó de menos en la final a los dos grandes vallistas españoles, como son Orlando Ortega y Asier Martínez, ambos fuera de concurso este verano por lesión. Habrá que ver si están recuperados para la próxima temporada y formar un gran trío junto a Enrique Llopis, que se quedó en semifinales después de una muy buena carrera en la que fue tercero, con 13.30, igualando su marca personal, Pero la última serie le dejó fuera de la final por tan solo una plaza y 5 centésimas.

«Da rabia porque cuando estás aquí, quieres luchar por todo. Cuando esté más tranquilo me daré cuenta que he hecho noveno en el campeonato del mundo. Solo ocho atletas han sido más rápidos que yo. Después de la pista cubierta vinieron meses muy difíciles, de muchas dudas. He pasado del puesto 16 en 2022 al puesto 9 en 2023 y estoy contento con mi evolución», dijo Llopis. En cuando a Jael Bestué, también quedó eliminada en las semifinales de los 100 metros.

Las semifinales de los 400 metros vallas auguran un gran espectáculo. Karsten Warholm ganó con un tiempo de 47.09 pese a problemas como el que sufrió en la segunda valla, y respondió a la destacada actuación que tuvieron sus principales rivales, el estadounidense Rai Benjamin, con 47.24, y el brasileño Alison Dos Santos, con 47.38. En categoría femenina, dominio absoluto de una Femke Bol dispuesta a todo tras el duro golpe que sufrió al caerse en la final del relevo mixto.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión