El Casademont sigue reforzando su sintonía con los aficionados, una consigna en la que se ha insistido en los últimos meses a través de diferentes iniciativas. La última tuvo lugar este martes, cuando todos los componentes de la plantilla se subieron al Bus Turístico de Zaragoza, con el que recorrieron, durante una hora, las principales arterias de la ciudad. El club aragonés, de esta forma, paseaba su nuevo proyecto por la capital aragonesa, después de haber completado la temporada más rutilante de toda su historia. Su descomunal curso le reportó al club tres importantes recompensas: su participación en las semifinales del ‘play off’, que multiplicó notoriamente el prestigio de la entidad; su clasificación para las competiciones europeas, que sitúa de nuevo a Zaragoza en el panorama internacional; y una comunión perfecta entre el equipo y la grada, de un valor incalculable, que vivió capítulos apasionantes a lo largo de la temporada.

La ruta comenzó en la parada del Bus Turístico, en la calle Don Jaime, donde la plantilla recibió la bienvenida de Sara Fernández y Cristina García, concejalas de Turismo y de Deportes, respectivamente. Inmediatamente después, desde el Paseo de Echegaray y Caballero, los componentes de la plantilla –que ya habían despertado una gran expectación entre los viandantes–, se subieron al Bus Turístico para recorrer la ciudad por espacio de una hora. Además, los jugadores realizaron una pequeña parada en la Plaza de España, donde se hicieron una foto de familia en la marquesina que el Casademont decoró días atrás con su imagen corporativa, con motivo de su actual campaña de abonados.

El zaragozano Rodrigo San Miguel, que dijo estar "muy feliz por regresar a casa", elogió la iniciativa: "Es muy importante llevar al equipo a la calle; que la gente nos vea, que nos sienta… Para que luego haya un buen ambiente en los partidos, esa identificación es básica", explicó el base aragonés, quien también se refirió a la fuerza del grupo: "Hubo un gran grupo el pasado año, lo que resultó determinante para que después llegaran los éxitos. Se conformó un gran equipo, con todo lo que conlleva la palabra equipo, y la idea es volverlo a conseguir. Por lo que he visto hasta el momento, el ambiente es buenísimo. Los que ya estaban en la plantilla están haciendo un gran trabajo para incorporar a la gente nueva", subrayó San Miguel.

La visita turística del Casademont es una más de las medidas que el club viene adoptando en los últimos meses. En la línea de acercarse a la afición se enmarca también la campaña desarrollada durante el pasado fin de semana en Puerto Venecia, con un despliegue de ocio y diferentes actividades que congregó a más de 3.000 aficionados en el complejo zaragozano. El pasado curso, ya se realizaron jornadas de puertas abiertas en el pabellón Príncipe Felipe, con más de 600 seguidores en cada una de ellas; así como otro tipo de iniciativas para acercar el baloncesto y la institución a la ciudad.

El nuevo proyecto ha vuelto a generar entusiasmo en la afición, toda que vez que, al margen de regresar a las competiciones continentales, la entidad ha sabido mantener la estructura principal del anterior ejercicio, que finalizó con la brillante presencia de los zaragozanos en las semifinales de la Liga ACB. De hecho, sigue en la plantilla el entrenador, Porfirio Fisac, y el club también se ha asegurado la continuidad de Alocén, Seibutis, Barreiro, Radovic, Justiz y Vázquez. Además, el Casademont ha acometido refuerzos de renombre, de rendimiento inmediato, tras haber cerrado las contrataciones de San Miguel, Seeley, Brussino, Benzing y Hlinason; mientras que Vit Krejci y Javi García ascienden desde la cantera al primer equipo.