El Racing de Ferrol, entrenado por el aragonés Emilio Larraz, acaba de brincar a la Segunda División B. Es el cuarto ascenso consecutivo del técnico, un currículo sin parangón en la competición.

Aseguran que el del Ferrol representa el ascenso más meritorio de su carrera.

Hay varias variables a analizar. Jugábamos ante el campeón andaluz, el Real Jaén, un equipo que había sumado más de 100 puntos en un grupo dificilísimo. Además, lo consumamos a domicilio y en un estadio con 10.000 espectadores. Racing de Ferrol y Real Jaén son clubes de superior categoría por todo: por historia, por masa social, por ciudad.

A ustedes les etiquetaban como el Real Madrid de la Tercera española. Pero han derrotado al Barça de la categoría…

Cuando se realizó el sorteo, todos subrayaron este emparejamiento. Para un entrenador, al menos en mi caso que no he sido futbolista profesional, la única forma de progresar en el fútbol es en base a obtener resultados. Y los hemos vuelto a lograr.

Ha ascendido a Segunda División B a los últimos cuatro equipos que ha dirigido.

El primero fue La Muela. Fue épico. El Sariñena fue con un conjunto experto, veterano. Después llegó el ascenso con el Aragón. Esta era una plantilla muy joven. Lo logramos en una situación de agitación en el Real Zaragoza, anterior a la llegada de la actual propiedad. Pese a toda la problemática que se arrastraba, ascendimos con 10.000 espectadores en La Romareda y muchos jugadores, hasta ocho, debutaron con el primer equipo. Conseguimos formar y competir a la vez. De manera que quedé muy satisfecho de esa etapa.

Equipos jóvenes o veteranos, plantillas cortas o largas; pero usted siempre obtiene el máximo rendimiento.

Esa es la labor del entrenador, saberse adaptar al hábitat para obtener el máximo rendimiento del colectivo que entrena. Además, el punto de convergencia de todos estos colectivos es su energía, su deseo. Sin la fuerza del deseo es imposible alcanzar el objetivo. Esta temporada hemos conseguido ser campeones pese a arrastrar tres lesiones de ligamentos cruzados y en un grupo tan exigente como el gallego, con clubes que incluso han militado en Primera División, como el Compostela.

Hace ahora un año dio el paso de marcharse de Aragón.

Tenía que hacerlo. Después de tres años con resultados muy satisfactorios en el Ebro en Segunda B, tras quedarnos muy cerca del ‘play off’ de ascenso a Segunda A, entendí que era necesario salir para poder desarrollar mi carrera. Marché a Ferrol con mi familia, con mi mujer y mis cuatro hijos.

Se interesaron por usted Lleida, Cornellá, Fuenlabrada… ¿Por qué se decidió por el Racing de Ferrol?

En la entrevista que mantuve con ellos tuve la seguridad de que se trataba de un proyecto ganador. Y el tiempo me ha dado la razón. Ahora, voy a continuar dos años más allí. El objetivo es alcanzar el fútbol profesional, la Segunda División A.

¿Cómo divisa el fútbol aragonés desde la distancia?

Solo hace un año que me marché: no ha podido cambiar mucho...

El Teruel ha descendido a Tercera División.

Dani Aso ha hecho una gran labor. La permanencia del Ejea me parece muy meritoria. Y el Ebro ha vuelto a hacer un gran año.

Ander Garitano ha anunciado su marcha del Ebro.

No abundan perfiles humanos y deportivos como el de Garitano. Complicado, encontrar profesionales con esa capacidad, dedicación e integridad.

Pasando al Real Zaragoza, Víctor Fernández acaba de renovar.

El historial de Víctor Fernández es muy superior al de anteriores entrenadores del Zaragoza. Se ha generado una gran ilusión con su continuidad. Espero que consiga ascender al equipo a Primera.

Emilio Larraz, nuevo entrenador del Racing de Ferrol