Dicen que lo más bonito del deporte son las amistades que te brinda por el camino. Años y años de intenso trabajo que con el paso del tiempo anudan lazos eternos. Sin embargo, el caprichoso deporte puede hacer que, durante unos minutos, tengas que dejar a un lado el corazón para medir tus fuerzas con tu rival más especial. Un amigo con el que has compartido tantas horas de exigente entrenamiento. Algo así es lo que les ocurre a dos de los mejores atletas aragoneses del momento. Carlos Mayo y Toni Abadía dejarán mañana (9.30) a un lado su estrecha amistad para batirse en una emocionante batalla por la victoria en la 10K Zaragoza. Ambos son las dos grandes figuras de una prueba que, junto a la Carrera Sin Humo que se celebra hoy (20.00), reúne a cerca de 6.000 ‘runners’. Atletas de todo tipo y condición: deportistas internacionales, profesionales, aficionado... No existe categoría que no esté representada en una de las carreras más populares de la ciudad. Y, entre todos los rostros anónimos, destaca la presencia de dos zaragozanos que, acostumbrados a competir en algunas de las mejores competiciones del mundo, pelearán codo con codo por triunfar en las calles de la ciudad que les vio nacer.

"Después de la temporada de invierno, que acabó en marzo, he estado con algunos problemas: un par de esguinces de tobillo, se me cayó una botella de cristal al pie y tuve que parar… Ahora viene la temporada de verano y estoy preparado para ir al máximo", advierte Carlos Mayo.

El joven afronta repleto de ilusión el comienzo de la temporada al aire libre después de un invierno difícil, complicado, pero que también le ha reportado alguno de los momentos más felices de su, todavía, breve trayectoria, como aquella clasificación para la final de los 3.000 metros en el Europeo de Belgrado.

"Necesito hacer mínima para el Campeonato de Europa sub 23. Llevo dos años sin correr 10.000 metros, así que necesito hacerla para poder ir. Ahora es el comienzo de un periodo corto pero muy intenso, así que espero que acabe con muy buenos resultados", indica el corredor del equipo Adidas, quien reconoce que ha preparado la carrera de hoy con un ánimo diferente. "Siempre es especial correr al lado de un amigo como Toni. Muy pocas veces se puede vivir un duelo tan abierto entre ambos, así que espero disfrutarlo al máximo. Los dos salimos a ganar, llegamos en un momento parecido, así que espero que podamos vivir una experiencia maravillosa", relata con una sonrisa.

Una rivalidad amistosa

A su lado, en la línea de salida del Príncipe Felipe, estará su fiel y admirado Toni Abadía. El atleta, que el pasado verano paseó el nombre de Aragón por la cita olímpica de Río de Janeiro, es el actual poseedor del récord de la prueba, después de que el zaragozano detuviera el año pasado el crono en 29:36. "Tengo que ser honesto y reconocer que me costó más de lo esperado. Esta edición es una incógnita si seremos capaces de correr por debajo de esa cifra, algo que no es nada fácil. Es un recorrido muy bonito, pero tiene algún tramo duro para ir a ritmos muy fuertes", reconoce Abadía, que estas tres últimas semanas ha trabajado en Sierra Nevada (Granada), junto al campeón de España de 10.000 metros, Juan Antonio Pérez. "La 10K en Zaragoza siempre es una fecha especial. Que este año la organización haya contado con Carlos para dar más espectáculo y vistosidad a la prueba es de agradecer. Desgraciadamente no podemos competir juntos muchas veces, así que para nosotros también es una oportunidad única de darnos un homenaje", explica el internacional, con la mente puesta en la próxima Copa de Europa de 10.000 metros, que se disputará en la capital bielorrusa de Minsk, donde coincidirá con su amigo y rival en la prueba.

"El seleccionador apostó por nosotros y la mejor forma de agradecérselo es prepararlo con mucho mimo. España es una de las más fuertes pero debemos demostrarlo", explica Abadía que, además de pasión por el atletismo, también comparte entrenador (José Luis Mareca) con su adversario. "No hemos pactado nada. Creemos que es una oportunidad única y la queremos aprovechar. Nuestro entrenador nos ha dicho que no quiere piques extradeportivos y nosotros vamos con la idea de que gane el mejor", concluye.

Amigos, compañeros y rivales que mañana lucharán, precisamente, por eso, por ser el mejor.