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Derbi a la vista

El Zaragoza y el Huesca se medirán el domingo después de que ambos dejaran escapar la victoria el pasado fin de semana.

Juanjo Camacho avanza entre Diego Rico y Albert Dorca en el derbi del pasado curso en La Romareda.
Aránzazu Navarro

Apenas se han disputado 180 minutos de Liga y ya llega el derbi aragonés en la Segunda División. Real Zaragoza y Sociedad Deportiva Huesca se carearán el próximo domingo a las 20.30 en el estadio de La Romareda. El encuentro llega después del contradictorio empate que sumó el conjunto zaragocista en Lugo, un partido que desveló a partes iguales la pegada en ataque y las alarmantes carencias en defensa. El Huesca, por su parte, también igualó ayer. Después de marcar ante el Nástic de Tarragona a solo 10 minutos del final, la victoria se escapó de El Alcoraz en los últimos segundos al anotar el cuadro catalán.


Cuatro puntos sumados sobre seis disputados constituye un bagaje notable para las dos primeras jornadas ligueras de Segunda División. La suma zaragocista se ajusta a la llamada media inglesa, esa ecuación que garantiza el éxito alternando victorias y empates. La fórmula se patentó en Inglaterra, primera liga que premió la victoria con tres puntos. Con el anterior premio de dos puntos por triunfo incluso sería más probable desde esa premisa matemática.


Por la media inglesa y por muchísimas sensaciones más, la holgada situación del conjunto aragonés en la tabla clasificatoria se sostiene sobre los óptimos dividendos que obtuvo de la primera jornada, cuando sacó del campo al UCAM Murcia. Los dos golitos de Ángel y el gol de Lanzarote plasmaron numéricamente la superioridad desarrollada por el Zaragoza sobre el terreno de juego. El resultado de 3-0 que señalaba el marcador se ajustaba mucho más a la realidad que el 3-1 final, llegado como consecuencia de un error defensivo.


El pasado sábado, el Real Zaragoza también anotó tres goles en Lugo. Curiosamente, también firmó dos Ángel y uno Lanzarote. Pero las conclusiones a extraer fueron diferentes. Después de una hora rebosante de firmeza defensiva y eficacia rematadora, el conjunto aragonés se desplomó. Un gravísimo error defensivo de Leandro Cabrera, que no se entendió con Xabi Irureta, propició el segundo gol gallego y, lo que es peor, la reacción del Lugo. Un tercer tanto que volvió a coger en ropa interior a la defensa aragonesa retrató a demasiada gente, además de restarle dos puntos a un Zaragoza que parecía tenerlos ganados en el minuto 70 y que sorprendentemente los dejó escapar.


Después del resbalón en el Anxo Carro de Lugo, se impone una rehabilitación inmediata. Al cobijo de su afición, el Real Zaragoza ya demostró ante el UCAM Murcia que es un conjunto muy competitivo. Esta versión espera repetirla ante un Huesca que el año pasado igualó con los zaragocistas tanto en La Romareda (3-3) como en El Alcoraz (1-1).

Conocimiento mutuo

Tiene bien estudiado el Huesca al Zaragoza. El técnico del equipo altoaragonés, Juan Antonio Albacete Anquela, ya asistió al estreno liguero ante el UCAM. Lalo Arantegui y Juanjo Camacho también presenciaron el partido. Los azulgranas han perdido a futbolistas importantes, como Fran Mérida (Osasuna) y Machis (Leganés). Pero nadie puede dudar de la capacidad azulgrana, que suele firmar buenos futbolistas a un precio muy razonable. Con la plantilla sin completar, el Huesca arrancó un empate sin goles en el primera jornada ante el Alcorcón. Ayer, el cuadro que gestiona Anquela estuvo muy cerca de la victoria ante el Nástic de Tarragona. Un gol de Samu Saiz la aproximó a solo 10 minutos del cierre del partido. Sin embargo, el Nástic reaccionó y logró el tanto de la igualada en el último suspiro por medio de Moha. Dos empates en dos partidos. Con estos precedentes visitará el Huesca a un Zaragoza que necesita ganar.