Blog Cuarta dimensión

por Carlos Bogdanich

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Con el roce hay crecimiento

La Ciencia siempre va avanzando y dejando atrás obsoletas técnicas que, con el tiempo, se van superando.

La Ciencia siempre va avanzando y dejando atrás obsoletas técnicas que, con el tiempo, se van superando.
El contacto del bebé con la madre se traduce en un aumento considerable de peso
Pixabay

A mediados del siglo XIX, en Europa, se puso la moda de la "frenología", la cual aseguraba poder predecir el potencial y la capacidad intelectual de una persona, palpando las protuberancias del cerebro. Es de imaginar que algunos eran reticentes a la prueba, por si se descubrían ciertas protuberancias en zona de "cornamenta", menudo sambenito y descrédito le caería.

Pero la cosa no acababa ahí, esta antigua teoría afirmaba la posible determinación del carácter del individuo y los rasgos de la personalidad, así como las tendencias criminales. Todo ello basándose en la forma del cráneo y morfología de la cara. Menuda "papeleta" para los que eran feos por naturaleza, ya que aún no se había descubierto plenamente la cirugía estética...

Pero pasan los años y se sigue indagando y experimentando con el cuerpo humano, en realidad aún sigue siendo una mina de descubrimientos. Un grupo de científicos norteamericanos ha descubierto en ratones que el roce con la madre estimula el crecimiento de la prole. En los humanos se ha comprobado también que, el contacto del bebé con la madre se traduce en un aumento considerable de peso y un mayor desarrollo del sistema nervioso.

Esperemos que la maldita obligatoriedad de no acercarnos por la pandemia, no nos haga limitar el crecimiento tanto físico como emocional, ni en los pequeños ni entre los grandes.

Felices pesadillas.

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