Ioan Danut: "¿Qué voy a hacer? No me ha quedado otra opción"

El empresario rumano que iba a ser desahuciado y se ha atrincherado en una nave de Figueruelas explica su situación a Heraldo de Aragón.

Ioan Donut, el primero por la izquierda, sale de la nave en la que se había atrincherado
Ioan Danut: "¿Qué voy a hacer? No me ha quedado otra opción"
G. Mestre

Ioan Danut, el empresario de origen rumano que iba a ser desahuciado y se atrincheró este martes por la tarde en una nave industrial de Figueruelas ha explicado a Heraldo de Aragón minutos antes de abandonar su encierro, en una conversación telefónica, los motivos que le llevaron a tomar esta decisión.


Según asegura, había pagado el alquiler de la nave hasta finales de 2013, aunque no le dieron ningún recibo, y en enero de 2014 le llegó la notificación del desahucio. Danut ha dicho que desde entonces ha intentado negociar, sin éxito, con la empresa propietaria de las instalaciones, ya que quería que la fianza que había pagado -3.500- euros- sirviera para abonar el importe pendiente y que le permitieran seguir en la nave, en la que desde 2010 ha invertido, según indica, más de 100.000 euros. Por ello, reclamaba que, en caso de que finalmente vendan la nave y se tuviera que marchar, le devolvieran parte de esa inversión, al menos 60.000 euros.


Ante la posibilidad de ser desahuciado y perder tanto la nave, en la que fabrica y distribuye quesos rumanos por establecimientos de Aragón y Navarra, como su inversión, Danut decidió encerrarse este martes por la tarde -antes de las 19.00- en las instalaciones y amenazar, mediante un mensaje a un amigo, con suicidarse. "No me ha quedado otra cosa que hacer. He perdido 110.000 euros. ¿Qué voy a hacer? ¿Cómo voy a vivir? No tengo otra cosa", ha asegurado a Heraldo en una conversación telefónica mantenida antes de que, tras 15 horas de encierro, decidiera deponer su actitud y salir de la nave. 


Danut llegó a España en el año 2000 y comenzó trabajando en el sector de la construcción, primero como albañil por cuenta ajena, más tarde como autónomo y finalmente como constructor. Sin embargo, con la crisis tuvo que reinventarse, por lo que decidió crear Quesos Vera, una empresa que fabricaba quesos rumanos, con la que se ha ganado la vida hasta ahora. De momento, ha logrado que se suspenda el desahucio.