La deuda municipal de Zaragoza ronda los 603 millones, 31 menos que hace un año
La ratio es del 77% y el Consistorio espera que baje del 75% para evitar la tutela de la DGA para el endeudamiento a largo plazo.
El Ayuntamiento de Zaragoza cerró 2023 con una deuda de 603 millones de euros, 31 millones menos que el año anterior, lo que sitúa el ratio respecto a los ingresos corrientes en un 77%. La concejala de Hacienda, Blanca Solans, ha destacado el "esfuerzo" que ha hecho la ciudad, pues supone una reducción de casi 45 euros por habitante.
Aunque la cifra "es elevada", la concejala ha pedido que se tenga en cuenta que en esa cantidad, que sitúa a la capital aragonesa entre las ciudades más endeudadas, incluye la deuda del tranvía. Sin tenerla en cuenta, la carga financiera, el dinero que la ciudad tiene pendiente con los bancos, ascendía a finales de año a 479 millones de euros.
Desde junio de 2019, cuando el PP asumió la alcaldía de Zaragoza, se ha pasado de una deuda de 830 millones (y una ratio del 116%) a los 603 con los que se cerró 2023. "Significa que hemos hecho que descienda un 27% en porcentaje y 227 millones. Hemos hecho gran esfuerzo por salir del marcador negativo que tenía la ciudad. La elevada deuda ha sido un lastre porque ha limitado capacidad de inversión y de recuperación", ha destacado.
Solans ha recordado que la inversión es importante para una ciudad, porque "no se solo a la construcción sino que implica mejoras desde el punto de vista social.
Ahorro en intereses
Al mismo tiempo tiempo que se lleva a cabo esta progresiva reducción de la deuda viva, el Área de Hacienda sigue trabajando en la reestructuración financiera, con el objetivo de reducir el gasto en intereses.
En este sentido, cabe recordar la operación de refinanciación de 153 millones de euros firmada por la alcaldesa Natalia Chueca a finales de 2023, que va a suponer un ahorro de 4,7 millones de euros en intereses para 2024 y condiciones más ventajosas para las arcas municipales durante los próximos 13 años. La operación ha consistido en la cancelación de tres préstamos firmados en los años 2005, 2007 y 2008, con cláusulas que han provocado desde entonces un sobrecoste total de 25.145.467 euros en intereses.
