La reforma de la avenida de Cataluña culminará en un año tras décadas de reivindicaciones
El Gobierno de la ciudad da luz verde a la segunda fase de las obras, que tiene un presupuesto de 1,2 millones y durará 9 meses
Del puente de Piedra sobre el Ebro al puente sobre el Gállego se extiende la avenida de Cataluña, antigua carretera nacional que sufrió décadas de abandono por la incapacidad del Gobierno central y el municipal de pactar quién debía sufragar el coste de la reforma y su mantenimiento. Dos décadas después de que empezara su tímida transformación, de que se estancara una y otra vez y se volviera a retomar, se ve el final de la rehabilitación de una arteria urbana de casi tres kilómetros en torno a la que se articula el barrio de La Jota, en el distrito del Rabal. En el primer trimestre de 2025 culminará una reforma que se empezó a ejecutar a goteo en 2003, cuando se actuó hasta la plaza de Mozart, dejando pendiente de desarrollo el tramo que retuvo Fomento hasta mayo de 2019, año en que cedió los 1.369 metros, con una superficie estimada de 21.953 metros cuadrados, del Grande Covián al río Gállego.
El Gobierno de Zaragoza aprueba este viernes el proyecto definitivo de la segunda fase de las obras, que tiene un presupuesto de 1,2 millones y un plazo de ejecución de nueve meses. El principal escollo a salvar es la rotonda bajo el puente del ferrocarril. "La complejidad de esta actuación radica en que el puente da soporte a dos líneas de tren (la de alta velocidad y la del ferrocarril convencional) y su estructura no puede verse afectada. Ha condicionado tanto la configuración en superficie como, sobre todo, la renovación de los numerosos servicios de gran envergadura que discurren bajo la calzada", ha explicado este jueves el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano.
Más de 40 años han estado los vecinos de La Jota reivindicando la cesión de la nacional, repleta no hace tanto de empresas y de naves abandonadas, muchas okupadas, y su transformación en la avenida de Cataluña, con los estándares de calidad que se exigen a las arterias principales de los barrios.
En diciembre de 2022 comenzaron los trabajos en el tramo que conecta la Z-30 y la calle del Veintitrés de Abril, una actuación valorada en 4,3 millones de euros, para actuar en 23.890 metros cuadrados y que ya está prácticamente acabada.
Infraestructuras lanza ahora una nueva fase, en la que se renovarán las redes de abastecimiento, alcantarillado y alumbrado, y se cambiará una tubería de medio metro de hormigón por otra de fundición dúctil, y se demolerá el pozo de registro que sobresale ahora de la acera. Porque tan importante es lo que se ve, como lo que no se ve. Se actuará, en total, sobre 5.850 metros debajo del paso ferroviario.
"Empieza a haber desarrollos"
La nueva rotonda bajo el ferrocarril, que se ejecutará con permiso del Adif, tendrá carriles bici y dará continuidad a los jardines que se ejecutan ahora.
Serrano insistió en la importancia de desatascar las demandas históricas en la ciudad. La reforma de la avenida de Cataluña, recalcó, "se prometió mucho durante años, pero se hizo poco o nada".
Los efectos de la reforma se notan ya. El concejal detalló que "en sectores urbanísticos que no tenían atractivo hoy vemos cómo con tranquilidad y moderación empieza a haber desarrollos". "Hay demanda de gente que nació en el barrio y que se quiere quedar, y la mejora de este vial ha contribuido a ello", ha remachado.
