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El joven que incendió el piso de su madre en Zaragoza podrá evitar la cárcel
Pasará dos años en un centro cerrado de desintoxicación y pagará 47.000 euros por los daños que causó el fuego en un edificio de la calle La Paz de Zaragoza.
El joven que en la madrugada del 9 de mayo de 2020 prendió fuego al piso de su madre y puso en peligro a toda una comunidad de vecinos de Zaragoza podría evitar finalmente la prisión. La Fiscalía pedía para el cuatro años de cárcel, pero el reconocimiento de los hechos y el abono de parte de las indemnizaciones permitieron alcanzar ayer un acuerdo con la defensa, que hizo valer el problema de drogadicción que arrastra el acusado para conseguir una alternativa a la cárcel.
El juicio contra S. R. J., de 28 años, debió celebrarse el pasado mes de octubre en la Audiencia de Zaragoza, pero este no se presentó ante el tribunal, que se vio forzado a dictar una orden de captura e ingreso en prisión. Como publicó HERALDO, la Policía Nacional logró localizar días después al acusado en Madrid, donde un juez decretó su envío al centro penitenciario de Soto del Real para asegurar su presencia en la vista que se celebraba ayer.
Cuando examinaron al joven, los forenses relacionaron su drogadicción con lo ocurrido aquella noche en el número 11 de la calle de La Paz, donde la tremenda humareda del incendio hizo que se vivieran auténticos momentos de pánico entre los vecinos. Los especialistas del Instituto de Medicina Legal de Aragón dijeron que el investigado había tomado anfetamina y cannabis, por lo que presentaba una psicosis tóxica asociada a una reducción del sueño. Aquello afectó a su capacidad cognitiva y volitiva, lo que ha servido para aplicar el incendiario una eximente incompleta de drogadicción.
Para alcanzar una sentencia de conformidad, S. R. J. tuvo que comprometerse a abonar 47.000 euros a las cuatro aseguradores que adelantaron las indemnizaciones a los damnificados. Antes del juicio, depositó algo más de 5.000, lo que allanó el camino para sellar el acuerdo. Ninguna de las partes mostró intención de recurrir el fallo, por lo que la presidenta del tribunal pudo dictar una sentencia in voce. De esta manera, se condena al causante del fuego a tres años de prisión, dos de internamiento cerrado en un centro de desintoxicación y otros cinco de tratamiento médico externo en otro centro especializado.
Agredió también a los agentes
Como recordó la defensa a la conclusión de la vista, para aquellos casos en los que la condena conlleva una pena de prisión pero también una medida de seguridad privativa de libertad, el Código Penal da preferencia al cumplimiento de la segunda. Por lo tanto, si encuentran un lugar adecuado para que el condenado pueda desintoxicarse, no acabará en Zuera.
Al confesarse autor de los hechos, durante cinco años, S. R. J. tendrá prohibido también acercarse a menos de cien metros del edificio donde se produjo el incendio. La Policía no tardó en identificarlo aquella madrugada como el responsable de lo sucedido, ya que varias personas le vieron prender fuego a las cortinas del salón del piso de su madre.
Al acceder en la vivienda, los agentes encontraron al investigado arrojando ropa sobre el fuego con la clara intención de avivarlo. El joven se encerró en una habitación para evitar que lo atraparan, pero al cabo de unos minutos salió de allí corriendo y arremetió contra los policías. De hecho, ha sido condenado también a sendas multas por un delito de atentado y otro leve de lesiones.
