Se acabó la fiesta. Fuentes de la Guardia Civil han informado a primera hora de la tarde de este martes de la disolución sin incidentes de la rave ilegal que desde el viernes se estaba celebrando en un terreno privado de la provincia de Zaragoza, a escasos 25 kilómetros de la capital.

Las mismas fuentes han indicado que el dispositivo establecido en la zona estaba compuesto por efectivos de Seguridad Ciudadana de las compañías de Casetas, Caspe y Calatayud, apoyados por el Seprona.

Y es que cientos de jóvenes, algunas fuentes aseguraban que en torno a 700, acamparon el pasado viernes en un terreno privado en el término municipal de Zaragoza celebrando una rave, o fiesta ilegal.

El volumen de gente era tal que incluso desde la Unidad Verde del Ayuntamiento de Zaragoza advirtieron de la fragilidad de la estepa circundante, por lo que en cuanto se desalojara el lugar se iban a analizar los "posibles impactos" de la invasión descontrolada de público en la zona.

El lugar de la fiesta, que se propagó a través de las redes sociales, se encontraba entre los municipios de El Burgo de Ebro, Torrecilla de Valmadrid y Mediana de Aragón. Pero nadie en los tres municipios sabía nada de que en sus alrededores se iba a celebrar el macrofestejo. Miguel Ángel Rabinal, alcalde de Torrecilla de Valmadrid, indicaba este lunes a HERALDO que no habían notado "nada especial a lo largo de todo el fin de semana, ni ruidos, ni aglomeración de coches... Nada de nada".

Por su parte, Luis Ángel Blasco, regidor de Mediana de Aragón, aseguraba haberse enterado de lo ocurrido "por las redes sociales". "No puedo decir más que nos hemos enterado todos por las redes sociales; por ellas han corrido algunos vídeos de gente que ha estado allí, pero nada más. Parece que algunos vecinos sí han debido acercarse a curiosear. Pero poco más puedo decir. El viernes, en cualquier caso, ya estaban allí cientos de jóvenes".

El alcalde de El Burgo de Ebro, Vicente Miguel Royo, indicaba que sí se había detectado en la localidad que algo inusual estaba ocurriendo. "A lo largo de todo el fin de semana, pero muy especialmente este domingo, sí hemos visto aparecer bastantes jóvenes que compraban cosas o se tomaban una cerveza en los establecimientos de El Burgo, incluso en la parada de autobús se ha podido ver a algunos de ellos. Pero en realidad nos hemos enterado de la 'rave' por las redes sociales, ni siquiera la Guardia Civil no ha avisado de nada".

Este lunes todavía quedaban en el lugar un centenar de vehículos y cientos de jóvenes escuchaban música proveniente de los cuatro escenarios montados in situ. La lluvia de los últimos días afectó a la 'rave' de múltiples maneras. Un operario de grúas de El Burgo de Ebro aseguraba este lunes que ya el viernes tuvo que hacerse cargo de un vehículo que había quedado atrapado en el terreno, y este mismo lunes acudió a la llamada de otro que había tenido un avería. Los caminos que llevan a la zona donde se celebra la 'rave' están en mal estado y la Guardia Civil controló el acceso desde todos ellos.

Según algunas fuentes, la cita se organizó desde colectivos relacionados con la música tecno de Cataluña. Y algunos de los participantes afirmaron que se había contratado un servicio de limpieza para dejar el lugar tan cual estaba. El encuentro, al parecer, se autofinanció con las barras de bebida que montaron los organizadores.