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Una anciana y su hija piden cárcel para una limpiadora por el robo de 10.000 € en joyas

La propia Policía advirtió a las víctimas al sospechar de las numerosas ventas de piezas de oro que estaba haciendo su asistenta del hogar.

Establecimiento donde la investigada vendió las joyas durante varios meses.
Establecimiento donde la investigada vendió las joyas durante varios meses.
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El Juzgado de Instrucción número 12 de Zaragoza ha dictado auto de apertura de juicio oral contra Brenda Liset M. V., una asistenta del hogar a la que  una anciana y su hija acusan de aprovecharse de la confianza que habían depositado en ella para limpiarles algo más que el polvo de la casa. Según las denunciantes, durante los meses que estuvo trabajando en sus respectivos domicilios esta mujer se habría apropiado de joyas y objetos por valor de 10.000 euros. Razón por la que ahora la acusan de un delito de hurto continuado y por la que solicitan para ella una condena de dos años y cuatro meses de prisión.

Como recuerda en su escrito de calificación el abogado Francisco García Berenguer, que ejerce la acusación particular en nombre de las perjudicadas, fue la propia Policía Nacional quien se puso en contacto con la más joven para que comprobara si le faltaba alguna joya. Los agentes la llamaron el 18 de mayo de 2021, cuando ya habían detectado que su asistenta del hogar acudía con regularidad a vender artículos de oro en un establecimiento ubicado en la avenida de Goya de la capital aragonesa.

Tras ser alertada por la Policía, la mujer hizo una serie de comprobaciones y constató que le faltaban numerosas piezas. De una mesa de su dormitorio habían desaparecido anillos, cadenas, pulseras, pendientes y relojes. Pero también se habían llevado joyas de la habitación de sus hijas, por lo que informó a los investigadores y les explicó que la única persona ajena a la familia que podía acceder con llave a su domicilio era la asistenta del hogar, quien llevaba trabajando para ellos desde enero de 2021.

Tenía acceso a las dos casas

La acusada también limpiaba y hacía trabajos domésticos en casa de la madre de esta mujer, a la que accedía también con su propio juego de llaves. Ante la sospecha de que la asistenta pudiera haberse llevado también las joyas de la anciana, la hija hizo inventario con ella. Y efectivamente faltaban pulseras, anillos y colgantes.

La Policía Nacional hace inspecciones periódicas en los negocios de compro oro de Zaragoza. Y gracias a ellas, el Grupo de Hurtos detectó que había una mujer que desde abril de 2021 al mismo mes de 2022 había cerrado trece ventas por distintos importes, pero nunca muy altos: entre 156 y 330 euros. Cuando los agentes mostraron a las perjudicadas fotografías de los lotes de piezas, estas las reconocieron enseguida como suyas.

Pero además las joyas que aparecían registradas en la tienda de compro oro, la más joven de las denunciantes se dio cuenta de que le faltaban unas medallas y pendientes de sus hijas, una colección de monedas antiguas, unas gafas de sol y tres relojes valorados en mil euros. Según esta, también habían desaparecido otros mil euros en efectivo. En la casa de su madre echaron en falta otros 1.300 euros, siete esclavas de oro, un collar y un reloj.

Según hace constar la acusación en su escrito de calificación, el 19 de mayo de 2022, cuando ya sabía que la Policía la investigaba, Brenda Liset M. V. envió un mensaje de Whatsapp a las denunciantes reconociendo la autoría del hurto de todas estas joyas.

La Fiscalía también ha presentado cargos contra la empleada del hogar, pero la condena que solicita para ella es más pequeña: un año y medio de prisión que podría sustituirse por la expulsión del país. En cuanto al botín, considera acreditado que a la anciana le hurtó piezas de oro por valor total de 5.106 euros, mientras que a su hija le habría robado joyas por un importe de 804 euros.

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