Zaragoza
La Virgen del Pilar recuerda con un manto de origami el día de la bomba de Hiroshima
Cada año, Zaragoza se une así a la conmemoración que se hace ese día en Japón del lanzamiento de la bomba atómica sobre esta ciudad.
Cada 6 de agosto se hace en Japón una ofrenda de grullas de origami en el parque de la paz de Hiroshim,a en el monumento a Sadako Sasaki, una de las 'hibakushas' (personas afectadas por la bomba atómica) más conocidas. Ese mismo día, en Zaragoza, la Virgen del Pilar luce un manto de origami modular.
El recuerdo a Sadako Sasaki el día en que explotó la bomba atómica en la ciudad se centra en la historia de las mil grullas de origami.
Asociaciones de origami de todo el mundo también participan en esta particular conmemoración enviando grupos de mil grullas. "En Zaragoza hemos mandado dos veces grullas a Hiroshima y luego nos mandan la foto del sitio en el que las colocan", explica Jorge Pardo, director de la Escuela Museo Origami de Zaragoza (EMOZ) e impulsor de la creación del particular manto.
Probablemente, por el material de que está elaborado, papel plegado, este manto sea el más austero de los más de 450 que componen la colección. Hoy, durante todo el día, la Virgen del Pilar estará vestida con este modelo de origami modular en el Camarín de la Santa Capilla.
El manto de papel que regaló el Grupo Zaragozano de Papiroflexia en 2007 es sin duda uno de los más singulares de cuantos se guardan en la sacristía de la basílica zaragozana.
La mayoría de los mantos están confeccionados con diferentes tipos de telas e hilos, y este manto de papel es, junto a otros que están hechos en ganchillo o cuero, "de los más especiales", apunta Jorge Pardo.
Este día, para unirse a la conmemoración que se hace en Japón en recuerdo del lanzamiento de la bomba atómica sobre Hiroshima, en la plaza del Pilar, en la pajarita de metal situada junto a la oficina de información y turismo, componentes del Grupo Zaragozano de Papiroflexia han enseñado a plegar figuras sencillas de papiroflexia.
Jorge Pardo explica que el manto de la Virgen está hecho en origami modular, con "más de 1.500 piezas unidas, concretamente 1.536 creo recordar -dice-, de papel plegado denominado 'brilliant metallic' y en tres colores: el fondo en azul, las dos pajaritas en blanco y el interior de las pajaritas en gris plateado".
Pardo recuerda que, cuando inventó este módulo, y lo llamó "módulo manto para identificarlo" cuando se difunde en medios especializados de origami.
El director del EMOZ comenta que, para que un manto se ponga en una fecha determinada, "hay que solicitarlo al Cabildo". En este caso, siempre están atentos al momento en el que lo colocan y lo quitan, en una maniobra en la que "son cuidadosos", por si es necesario retocar algo en el conjunto de miles módulos de papel unidos, pero en estos dieciséis años "no ha hecho falta hacer nada".
Al contrario que la mayoría de la colección, que son planos, este manto de papel plegado es que es "de los pocos que tienen volumen y se guarda en una caja especial que se hizo" para ello.
También desvela que, aunque no es lo habitual en el origami modular, donde solo se ensamblan unas piezas con otras sin utilizar ningún tipo de material adhesivo, debido al especial uso al que estaba destinado este manto se puso "una tela interior" para poder manejarlo mejor.
