tribunales
Extinguida la pena al violador de una discapacitada tras rebajarle en dos años y medio la condena
Fue sentenciado en 2011 a 13 años y medio de cárcel. El hombre, no obstante, permanecerá en prisión hasta 2027 porque tiene condenas por otros delitos distintos.
Salah Eddine Mqadmi es el nuevo beneficiado en Zaragoza de la actual redacción de los artículos del Código Penal que regulan las penas para las violaciones en la Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, conocida como ley del ‘Solo sí es sí’. En todos los casos resulta lamentable que se anticipe la salida de la cárcel de un agresor sexual, pero este es especialmente penoso por ser la víctima una joven discapacitada y porque el violador no actuó solo.
La revisión de condena que le permite liquidar la pena a un violador es la segunda que se registra en menos de una semana dictada por la Audiencia Provincial de Zaragoza. Justo el jueves pasado se benefició en los mismos términos Jalal Aarabou, quien cumplía 12 años por violar a una mujer en Zaragoza.
Ahora va a ser Salah Eddine quien ha saldado la deuda con la Justicia por la agresión sexual antes de lo previsto. No obstante, como está cumpliendo penas por otras causas diferentes, no terminará de liquidar sus condenas hasta 2027. El hombre, de 44 años, fue condenado por violar en 2009 a una joven de 25 años, con una discapacidad mental del 65%, a la que asaltó cuando caminaba por el paseo de Calanda.
El agresor llamó a la víctima desde una furgoneta y, cuando esta se acercó pensando que querían preguntarle algo, otro hombre salió del vehículo y la empujó dentro del vehículo. A continuación, aparcaron en un descampado del Camino de los Molinos y Salah Eddine la violó mientras el otro individuo, nunca localizado, la sujetaba por los brazos. Después, empujaron a la chica fuera del vehículo y la abandonaron a su suerte. La joven pudo llamar al 112 desde una cabina y recibió ayuda.
La Policía no logró detener a Eddine hasta junio de 2011, cuando cometió un robo con violencia y su ADN hizo saltar la alerta en el banco de datos genéticos de delincuentes. El violador está en prisión desde entonces.
La Audiencia Provincial de Zaragoza lo juzgó en noviembre de este año y lo condenó por un delito de violación con las agravantes de cometerla en grupo y la víctima ser una persona vulnerable. El Código Penal vigente entonces establecía que, para una agresión así, la pena debía ir de un mínimo de 13 años, 6 meses y 1 día a un máximo de 15 años.
El tribunal estimó que "en atención a la inexistencia de lesiones físicas en la agraviada y la ausencia de otras circunstancias que denoten una especial perversidad del procesado, ha de imponerse la pena en su grado mínimo, esto es, en 13 años, 6 meses y 1 día".
A petición del acusado, su abogado, Javier Osés, solicitó a la Audiencia la revisión de la sentencia de acuerdo con el texto de la nueva ley. Argumentaba el letrado que, dado que el arco punitivo del mismo artículo se ha reducido de 7 a 15 años (antes era de 10 a 15), la pena en abstracto quedaría ahora entre un mínimo de 11 años y un máximo de 15 para una violación con dos agravantes. Y como entonces el tribunal valoró que no existían otras circunstancias ("lesiones físicas" o "especial perversidad"), ahora también debe imponerse la mínima, que es de 11 años.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular se opusieron a la rebaja, alegando que se le podía seguir imponiendo la misma pena, puesto que entra perfectamente en la horquilla señalada, pero la Sección Sexta entiende que no es así y que ha lugar al beneficio para el reo.
Salah Eddine Mqadmi lleva cumplidos 11 años y 8 meses de cárcel y habría finiquitado la condena inicial en diciembre de 2024. Su abogado ha pedido al tribunal que acuerde su libertad definitiva al haber "cumplido sobradamente su pena de prisión". Por esta causa ya puede salir, pero no podrá hacerlo hasta 2027, cuando liquide definitivamente sus cuentas con la Justicia por otros delitos cometidos.
