El edificio recién desalojado en el corazón de Zaragoza tiene mucha historia y a lo largo de sus más de 130 años de existencia ha tenido múltiples y variados inquilinos. Conocido como Luis Buñuel fue colegio militar, museo de Bellas Artes, Casa Consistorial de la ciudad y, finalmente, instituto.

Enclavado en la plaza de Santo Domingo, en pleno Casco Histórico zaragozano, el Luis Buñuel tiene casi 6.000 metros cuadrados de techo que rodean un gran patio central. El edificio había sido proyectado originariamente por el insigne arquitecto Ricardo Magdalena para Colegio Preparatorio Militar, aunque este tuvo una vida muy efímera. Se suele datar la construcción entre los años 1880-1882 y se cuenta que se levantó sobre una parte del solar del convento de dominicos, destruido durante los Sitios. 

De aquel edificio medieval se conservaron la iglesia, integrada y remodelada en la vecina Casa Amparo, y el refectorio, utilizado como Archivo y Biblioteca Municipales hasta su traslado a la sede actual. De hecho, en toda esta zona del barrio del Gancho, hay bellos ejemplos de refectorios góticos y naves cubiertas con crucería sencilla con ventanas ojivales como las del actual Centro de Documentación del Agua.

De vuelta al Luis Buñuel, el edificio se habilitó después como Museo Provincial de Bellas Artes hasta el año 1911, en que se trasladó a su ubicación actual en la plaza de los Sitios. Posteriormente, albergó las dependencias del Ayuntamiento de Zaragoza, hasta que regidores y administrativos se trasladaron a la actual casa consistorial de la plaza del Pilar, a comienzos de la década de 1960. De aquella época como palacio municipal aún quedan algunos elementos como el escudo sobre el dintel de la puerta principal.

Ayto. Zaragoza

Años después a que los munícipes hicieran su mudanza, el edificio fue rehabilitado y acondicionado para albergar el instituto de bachillerato Luis Buñuel. Fue en 1986 cuando llegaron los alumnos del instituto a la plaza de Santo Domingo y allí dieron clase aproximadamente hasta el año 2005, cuando estrenaron un nuevo y moderno edificio en La Almozara. Esos primeros años de siglo el edificio ya vacío se fue echando a perder -a pesar de que tiene vestigios del antiguo convento, incluso, en el patio- y fue en el año 2012 cuando varios colectivos lo ocuparon sin permiso para desarrollar actividades comunitarias. Las entidades del barrio pedían que se hiciera un centro cívico, pero en 2018 el anterior equipo de gobierno de ZEC, con Pedro Santisteve al frente, firmó un convenio de cesión durante cuatro años con el Centro Social Comunitario. 

La 'Guía Histórico-Artística de Zaragoza' lo califica como “una austera construcción en ladrillo, consistente en un cuerpo central, con fachada resaltada, y dos alas transversales en los extremos, unidas por una verja que encierra un jardincillo”.