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Un zaragozano paga 20.000 € tras acceder a un portal de citas y ser víctima de un chantaje
El denunciante se vio forzado a hacer varias transferencias por Bizum al recibir violentas amenazas contra él y su familia.
Las nuevas tecnologías han llegado también al negocio de la prostitución, que desde hace algún tiempo ofrece a sus adeptos la posibilidad de concertar citas a través de diferentes portales de internet. Pero como ocurre muchas veces en la red, no siempre las cosas son lo que parecen. Y el compartir datos o información sensible con desconocidos puede acarrear graves consecuencias. Como le ha ocurrido a un zaragozano al que su última visita a la plataforma de contactos www.pasion.com le ha salido nada menos que por 20.000 euros. Porque esa es la cantidad que tuvo que desembolsar mediante pagos fragmentados a través de bizum tras ser víctima de una chantaje y llegar a temer tanto por su integridad como por la de su familia.
Según ha podido saber HERALDO, no era la primera ni la segunda vez que el hombre recurría a esta web para concertar encuentros sexuales con meretrices. Él mismo habría reconocido después que las anteriores citas se desarrollaron sin problemas. Sin embargo, a mediados de abril del año pasado entró en el portal y tras conversar con alguna mujer no llegó a contratar ningún servicio. Para su sorpresa, pocas horas después empezó a recibir «numerosísimas» llamadas telefónicas y mensajes de Whatsapp amenazantes. Desconocía a su interlocutor, pero le dejaba claro que había estado «molestando a las chicas» y tendría que pagar por ello.
Los extorsionadores le exigían el abono «inmediato» de distintas cantidades a través de transferencias bancarias o Bizum, facilitándole las cuentas y los números de teléfono a los que tenía enviar el dinero. En su afán por presionar a la víctima del chantaje, además de hacerle hasta una docena de llamadas seguidas, llegaron a decirle que de no obedecer sus órdenes le enviarían «a los chicos» para hacerle daño tanto a él como a sus allegados. Todo ello, entre insultos y amenazas.
«Es decir, que no era intimidante tan solo en contenido de las llamadas, sino la propia dinámica de las mismas: extremadamente insistentes con el propósito de producir un estado de nerviosismo que indujera a la víctima a realizar los pagos para dejar de sufrir las molestias y aliviar el atosigamiento al que se le sometía», dice el informe que la Sección de Investigación Criminal de la Guardia Civil remitió al titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza. Porque, tras desembolsar por miedo hasta 20.000 euros, al seguir recibiendo amenazas para hacer más pagos el hombre acabó denunciando los hechos.
Con los datos facilitados por el denunciante –pantallazos de su teléfono con los mensajes y amenazas recibidas, apuntes bancarios de las transferencias, destinatarios, etc–, el equipo de Investigación Tecnológica de la Benemérita empezó a hacer también pesquisas. Después de contactar con las entidades bancarias a las que pertenecían las cuentas a las que se había enviado el dinero, los investigadores empezaron a estrechar el cerco sobre los posibles extorsionadores.
Preguntado por las características de la persona o personas con las que habló por teléfono, el denunciante dijo que fue un único individuo al que no conocía y que tenía acento de «Europa del Este». El hombre hizo saber a los agentes que era una voz «enlatada», por lo que llegó a sospechar que conversaba con una «máquina». En cualquier caso, parece que esta «respondía» también a sus preguntas.
Cuatro investigados en Valencia
El rastreo de las cuentas utilizadas, los apuntes bancarios, las grabaciones de las cámaras de distintos cajeros automáticos donde se retiraba el dinero y otras pistas han llevado finalmente a los investigadores a identificar a cuatro personas por su presunta implicación en este y posiblemente otros chantajes similares. Se trataría de dos hombres y dos mujeres. En el caso de los varones, a uno de ellos le constan hasta 57 reseñas policiales por delitos de extorsión, contra el patrimonio o pertenencia a organización criminal.
Las pesquisas de los investigadores, en colaboración con sus compañeros de la Comandancia de Valencia, han permitido averiguar que el otro hombre también fue detenido recientemente en Valdepeñas (Ciudad Real) por un chantaje idéntico al denunciado en Zaragoza. Los cuatro encausados fueron interrogados por los agentes y están a la espera de declarar ante el juez por delitos de extorsión, blanqueo de capitales e integración de banda criminal.
