La construcción de viviendas disminuye un 8% en la ciudad tras la recuperación de 2021
Urbanismo concedió 1.306 licencias para pisos, de los que el 18% son VPO. Arcosur, Valdefierro y la Margen Izquierda aglutinan los nuevos permisos.
Tras la rápida recuperación que experimentó el sector de la construcción de viviendas de la capital, 2022 se cerró con una caída del 8%, lo que evidencia una ralentización del sector. En total, el Ayuntamiento de Zaragoza concedió licencias para 1.306 pisos, de los que 236 eran de VPO. Arcosur, Miralbueno, Oliver-Valdefierro y la Margen Izquierda siguen siendo las zonas que concentran la actividad inmobiliaria de la ciudad en este momento.
Quitando el año de la pandemia, cuando se otorgaron 1.035 viviendas, hay que remontarse al año 2015 para encontrar una cifra menor (1.040). Ese fue el ejercicio que marcó el punto de inflexión hacia un proceso de estabilización del mercado inmobiliario de la ciudad después de la época de la burbuja inmobiliaria.
Solo en 2006 se entregaron 8.940 permisos, gracias al tirón de las viviendas protegidas de Valdespartera, que suponían la mitad del total. El pulso aflojó progresivamente en los años siguientes hasta que entre 2010 y 2011 estalló la burbuja y en 2014 en Zaragoza se concedieron licencias solo para 525 pisos, el mínimo histórico.
El efecto de la pandemia
"Ha caído un poco respecto a 2021, pero es que en 2020 hubo licencias que con motivo de la pandemia se retrasaron al 2021", declaró el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano. A su juicio, en 2022 el sector inmobiliario "se ha estabilizado". "Son datos razonables. Si se analizan ciudades de nuestro entorno, las cifras van por ahí", afirmó el responsable municipal, que también advirtió un aspecto clave: "Lo que sale se vende".
En 2022 el peso de la construcción de viviendas en la ciudad recayó en Arcosur, un sector que empieza a ver la luz. En concreto, se concedieron 425 licencias en este barrio del sur de la ciudad, de las que 204 son de protección oficial. Es casi la totalidad de las VPO desarrolladas en la ciudad, dado que Urbanismo concedió 236 permisos a lo largo del año. Precisamente en 2022 se produjo un aumento sustancial del número pisos subvencionados, el mejor dato desde 2015. Serrano explicó que Urbanismo ha apostado por el impulso de Arcosur. "No se han sacado otros desarrollos para no perjudicar a Arcosur. Y sigue habiendo interés por los suelos", declaró.
Además, a lo largo del pasado ejercicio sobresalieron las promociones en Oliver-Valdefierro (211 viviendas), Margen Izquierda (145) y Miralbueno (100). También en Torrero, La Paz y San José (111), gracias al tirón que supusieron las 70 viviendas en construcción en el parque de Pignatelli. En el entorno de la avenida de Navarra, se dieron licencias para 53 pisos, mientras que en Las Fuentes se pusieron en marcha otros 46.
Un año marcado por la inflación
Para el sector, el año 2022 no fue fácil. El presidente de la Federación de Empresas de la Construcción de Zaragoza (Fezca), Juan Carlos Bandrés, considera que el ejercicio estuvo marcado por la elevada inflación, que afectó especialmente a los costes de las materias primas. "Esos costes no se pueden trasladar al precio final de la vivienda. De hecho, la vivienda ha crecido en precio pero menos de lo que sería necesario", explica.
Hubo un problema añadido: la subida de los tipos de interés que afectan tanto a los préstamos del promotor como del cliente final. "Es otro palo más en la rueda de el sector", comenta Bandrés, que considera que en este contexto de inestabilidad el mercado está en fase de estabilización. Destaca el desarrollo de los solares pendientes de Valdefierro, junto al corredor verde, o los nuevos desarrollos como Arcosur, que tiene oferta de vivienda asequible.
Bandrés expone una queja sobre los plazos de tramitación de las viviendas de protección oficial. "Los trámites se están prolongando en exceso en la DGA y eso está generando dificultades para mantener al cliente de VPO, que sí que existe. Pero a veces esa burocracia está retrasando el inicio de esas obras y haciendo que el cliente no se mantenga en la idea de comprar", declara. A su juicio, el año pasado se podrían haber construido el doble de VPO con menos trabas.
A la espera de los futuros desarrollos en el sureste de la ciudad y en el entorno de la prolongación de Tenor Fleta, Serrano y Bandrés coinciden en que en 2023 habrá continuidad. El empresario confió en que de cara al futuro haya un proceso de "maduración" del sector que permita mejorar los ratios actuales de licencias gracias a una mayor la calidad. "Creo que en 2023 va a haber un estancamiento, las cifras no van a ser mejores que en 2022, aunque tampoco peores", añadió el concejal de Urbanismo.
