Por qué habría que hacerle un monumento al corro del chirimbolo
Los Titiriteros de Binéfar encienden con oficio y tradición la chispa de la fiesta en el Parque de las Marionetas.
![Gran ovación para los Titiriteros de Binéfar.](https://imagenes.heraldo.es/files/image_990_556/uploads/imagenes/2022/10/08/gran-ovacion-para-los-titiriteros-de-binefar.jpeg)
Faltaban aún unas horas para que comenzasen oficialmente los esperados Pilares de 2022, pero los Titiriteros de Binéfar ya habían escenificado con su oficio y calidad por qué las fiestas populares son necesarias para la salud de la sociedades. Desde el principio se generó una comunión intergeneracional al margen de la rutina y el estrés diarios y tejida con el hilo de la tradición. Divirtiendo, los Titiriteros son verdaderos divulgadores y prescriptores de la cultura y geografía aragonesas. Una fórmula infalible e inmarcesible elaborada al calor de algo aparentemente tan sencillo como bailar el corro del chirimbolo.
Con poderío demiúrgico, los Titiriteros animaron a la gente a cogerse de las manos -parece mentira que hace un año todo lo presidiera la distancia social- y dando vueltas mareantes se hizo la fiesta en el Parque de las Marionetas.
Ganas se nota que había. Gran parte del público venía entregado de casa y abarrotó el recinto desde antes de las 11.00, la hora marcada para el inicio del espectáculo. La mayoría de los padres (y tíos y abuelos) se sabían las canciones y guiaban a sus hijos en viajes imaginarios a las cimas de los Pirineos o a las estaciones de tren de Huesca o Zaragoza. El periplo incluyó también todo tipo de músicas, de la jota al rock. Lo mismo se sacudían las manos a modo de castañuelas que se meneaban las caderas.
Eva Paricio, maestra de ceremonias, ya lo avisó desde el principio: lo suyo es muy diferente a lo que ofrecen internet y las pantallas. Y hubo que darlo todo: "¿Estáis cansados?", preguntaba después de que allí todo mundo hubiera saltado, rodado por el suelo o hecho un trenecito con humo y agua de verdad incluidos.
Así, tan en alto, los Titiriteros de Binéfar han inaugurado el Parque de las Marionetas, una de las citas que a estas alturas ya pueden elevarse a la categoría de clásico en el programa de fiestas. A partir de este misma mañana, son varios los escenarios y carpas (Bagdad, el Palacio de los Prodigios, Teatro de las Melodias, Mágica, Cabeza Parlante y Salón de los Sueños) que ofrecen verdaderas delicatessen del panorama nacional e internacional del teatro para niños hasta el día 12 de octubre.