sucesos
La banda de veinteañeros de Zaragoza que sigue e inmoviliza a sus víctimas no irá a prisión
Los delincuentes atacan siempre de madrugada: eligen a su 'presa', la siguen sigilosamente por la calle y cuando llega a casa y se dispone a sacar las llaves del portal la abordan por la espalda con violencia.
Casi diez años de prisión. Esa era la condena a la que se enfrentaban este lunes tres veinteañeros de Zaragoza que se dedican a atacar e inmovilizar a sus víctimas cuando regresan a casa solas de madrugada. El Juzgado de lo Penal número 6 los ha sentado en el banquillo por los tres robos con violencia que perpetraron en apenas dos horas y media el 20 de junio de 2021, pero tienen abiertas muchas más causas por hechos muy similares. Eso sí, esta primera rendición de cuentas ante la Justicia no ha podido salirles mejor, ya que ninguno de los acusados pisará finalmente la cárcel.
El modus operandi es siempre el mismo: identifican a una persona que camina en solitario por la calle, la siguen discretamente hasta el portal de su vivienda y cuando se dispone a abrir con la llave se abalanzan sobre ella. Y no tienen ningún reparo en recurrir a la violencia, ya que su tarjeta de presentación es un fuerte empujón por la espalda. Acto seguido, dos de los jóvenes sujetan con fuerza a la víctima mientras un tercero la cachea en busca de cualquier objeto de valor.
El primero de los asaltos por los que eran hoy han sido juzgados se produjo sobre las 0.15 en la glorieta de Diego Velázquez, junto al Parque Pignatelli de la capital aragonesa. La víctima no se percató de que Vasile M. T., Adrián T. P. y Luis D. B. llevaban un rato siguiéndole los pasos, por lo que el ataque fue absolutamente sorpresivo. Apenas le dio tiempo a reaccionar, ya que cuando quiso darse cuenta le habían quitado el móvil y los 60 euros que llevaba encima y se habían dado a la fuga.
Apenas hora y cuarto después, el trío elegía una segunda víctima y la seguía hasta la calle del Carmen de Zaragoza. Cuando el joven se disponía a abrir el portal, se le echaron encima por la espalda y una vez inmovilizado le quitaron también la cartera y el teléfono. Como en el robo anterior, cuando consiguieron el botín, salieron corriendo.
Solo un cuarto de hora más tarde, los delincuentes volvían a intentarlo por tercera vez. Pero en esta ocasión corrieron peor suerte, ya que la víctima les plantó cara. Como hace siempre, la banda siguió al chico hasta su casa en la avenida de Goya, donde se abalanzaron de forma violenta sobre él para quitarle un Iphone 7 que llevaba en el bolsillo trasero. Pero la víctima logró atrapar del brazo a uno de los ladrones, y justo entonces pasó por allí una patrulla de la Policía Local de Zaragoza. Al ver a los agentes, los ladrones devolvieron el móvil al joven e intentaron huir, pero acabaron detenidos.
La Fiscalía acusaba a los delincuentes de tres robos con violencia, uno de ellos en grado de tentativa, por los que pedía sendas penas de nueve años y nueve meses de prisión. Sin embargo, la abogada Soraya Laborda ha pactado un beneficioso acuerdo por el que serán condenados a dos años y medio. Pero al no superar el castigo de cada uno de los robos los dos años de cárcel, se les suspenderá el cumplimiento de la pena y no pisarán la cárcel de Zuera.
