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Así será la nueva calle Félix Latassa de Zaragoza, cuya reforma integral comenzará en marzo
Las obras supondrán una inversión de 965.920 euros e incluirán un trazado ligeramente sinuoso en la calzada para reducir la velocidad de los vehículos
La calle de Félix Latassa, en el distrito zaragozano de Universidad, empieza ya su cuenta atrás de cara a su reforma integral. Las obras comenzarán, si no hay imprevistos, en el mes de marzo y dotarán a la vía de aceras más anchas y arbolado, del que hasta ahora carece por completo. Los trabajos irán en la misma línea que los que se llevarán a cabo en el resto de los proyectos incluidos en la denominada por el gobierno PP-Cs como 'operación calles', por lo que, de nuevo, darán prioridad al peatón e incluirán medidas para la pacificación del tráfico, en este caso, una calzada con un trazado más sinuoso. Supondrán una inversión de 965.920 euros y cuentan con un plazo de ejecución de unos diez meses.
El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha dicho durante la presentación del proyecto que hace mucho tiempo que no se reforma una calle de manera integral en esta zona: la última, la de Mariano Barbasán hace 20 años. "Esto se une a otros trabajos que se están haciendo y que también son históricos, desde la prolongación de Tenor Fleta al inicio de las obras en Pontoneros", ha enfatizado el regidor, que ha recordado que el presupuesto municipal para 2022 incrementará hasta los 79 millones de euros la inversión en "obras necesarias para mejorar la ciudad".
Sobre el proyecto de Félix Latassa, ha asegurado que la futura calle está pensada para los vecinos y el comercio, tiene en cuenta las nuevas necesidades de los peatones y será "más accesible, segura y verde". En concreto, el objetivo es que se transforme en una vía más amable y atractiva para los clientes de sus tiendas y establecimientos hosteleros, así como incrementar la calidad ambiental preservando la movilidad.
En este caso, no se ha optado por una plataforma única, sino que la calle seguirá teniendo la calzada a diferente nivel que las aceras, contará con un carril de circulación ligeramente sinuoso y con una banda de aparcamiento que se situará a un lado u otro en tramos alternos. Con esta configuración, será posible ampliar el tamaño de las aceras para mejorar la movilidad peatonal y, asimismo, habilitar espacios de maniobra para Bomberos adaptados a la normativa actual.
El ancho de las aceras, como ha explicado la jefa de proyectos de la sociedad municipal Ecociudad, Inma Subiri, irá variando de una manzana a otra y se colocará arbolado donde las instalaciones del subsuelo lo permiten, ya que actualmente no hay ningún elemento vegetal. En total, se plantarán 21 árboles de porte medio y plantas arbustivas bajas junto a las curvas de la calzada, lo que pretende servir para ayudar a identificar el cambio de trazado. Además, para mejorar la conexión peatonal, la accesibilidad y la seguridad vial, se va a crear un nuevo paso de cebra junto al mercado que será elevado y tendrá diez metros de ancho.
Igual que en las demás calles incluidas en esta operación, la reforma supondrá, como ha recordado también la concejal de Infraestructuras, Patricia Cavero, la renovación de las tuberías de saneamiento y de abastecimiento de agua, e incluirá nuevas conexiones de servicios con las calles de Andrés Vicente, La Salle, San Juan de la Cruz, Mariano Barbasán y la avenida de Goya. Igualmente, el alumbrado, que ahora está colocado en las fachadas, se sustituirá por farolas situadas en las aceras y dotadas de tecnología led.
