Las mujeres de Tierga crean su pinar mágico

Las vecinas confeccionan con materiales reciclados las puertas y ventanas que colgarán en los árboles habitados por barriguitas-duendes.

Las vecinas durante los talleres para crear el pinar mágico.
Las vecinas durante los talleres para crear el pinar mágico.
P. López Rojo

Un pinar mágico. En eso se convertirá La Punta de la Costera de Tierga en unas semanas gracias a la iniciativa de la asociación de mujeres Santa Rosa de Lima de la localidad. La agrupación ha decidido poner en marcha la idea de Ana Silvia Sisamón, una vecina que junto con Eva María Barcelona ha puesto en marcha este proyecto bajo la premisa de promover la llegada de nuevos turistas a esta pequeña localidad del Aranda y, al mismo tiempo, ocupar sus ratos libres creándolo.

"Llevábamos pensando en la idea hace más de un año, pero la covid nos ha obligado a posponerla. Ahora que ya se puede nos reunimos semanalmente para ir creando las puertas, las ventanas, todo con material reciclado: ramas, piedras, cortezas de árboles caídos", relata Eva María Barcelona, que además es la profesora de manualidades de la localidad.

Los talleres se hacen los miércoles por la tarde para que la gente del pueblo participe, pero además se realiza una sesión cada fin de semana de forma alterna, para que los tierganos que viven fuera también puedan aportar su granito de arena. Y es que son muchos los hijos de este municipio, de poco menos de 200 habitantes, que viven fuera pero se escapan siempre que pueden a su localidad natal.

"Estamos consiguiendo que la gente se involucre y sienta que es un proyecto común. Todos somos uno, tanto niños como mayores. Además, nos lo pasamos genial en los talleres, está siendo una experiencia muy positiva que permite que niños y mayores compartan experiencias y su forma de recrear el pinar mágico", relata satisfecha Barcelona. No deja de pensar en ideas para dar vida a este lugar encantado. "Hemos visitado algunos similares para coger ideas, pero el nuestro tendrá sello propio", asegura.

Las aportaciones espontáneas también están surgiendo. Una vecina ha donado una colección de muñecas barriguitas que se transformarán en duendes, ataviadas como tal, en el taller de costura que ya ha comenzado estas semanas de agosto.

La idea es que este pinar mágico, del que todavía no se ha concretado el nombre, comience a montarse a mediados de septiembre. "Ponemos lo que tengamos y la idea inicial es animar 18 pinos, pero iremos alargándolo poco a poco", concreta esta creadora. El pinar elegido para la intervención se ubica muy próximo al casco urbano y es de fácil acceso. Hemos seleccionado este espacio porque nos permitirá tener un mayor control del mismo y acudir en cualquier momento para poder realizar cualquier incorporación o reparación», comenta.

Duendes, hadas, mariposas, atrapasueños y otros puntos mágicos con muchas sorpresas conformarán este nuevo espacio recreativo en la localidad, ideal para la visita de un público familiar.

Esta iniciativa se suma a la que llevaron a cabo esta primavera en el taller de maceteros reciclados que decoran y adornan sus calles. Y es que al visitar este municipio enclavado en valle del Isuela puedes encontrarte con divertidos y coloridos gusanos o delfines que animan sus calles y plazas.

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