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Un domingo para limpiar y cuidar de la naturaleza en Zaragoza
Más de un centenar de personas acuden a la convocatoria ciudadana para recoger basura en la ribera del Ebro.
En medio del bombardeo diario de malas noticias, de contagios, de ingresos, de fallecidos... a veces hasta sorprende encontrarse con algo positivo. Así es como se han sentido quienes caminaban la mañana de este domingo por el paseo de Echegaray y Caballero de Zaragoza al toparse con alrededor de un centenar de personas que esperaban, separados en pequeños grupos para mantener las normas sanitarias, a que fuera la hora de comenzar a limpiar la ribera del río Ebro. También los organizadores, Iván Jerez y Miriam Redondo, se han visto "abrumados" por la gran acogida que ha tenido su iniciativa, que ha multiplicado por diez el número de asistentes del año pasado, cuando se hizo por primera vez. El objetivo es sencillo, retirar toda la basura posible y, de paso, vivir un día diferente y al aire libre.
Tal y como ha explicado Jerez antes de comenzar el recorrido, después del confinamiento y con las restricciones para hacer frente al coronavirus, se ha incrementado notablemente el ocio al aire libre. "La gente se maravillaba con la naturaleza y muchos no saben la importancia que tiene el río en cuanto a fauna y flora", ha resumido. En este sentido, han sido numerosas las familias que han acudido a la quedada para que los más pequeños sean conscientes de la necesidad de respetar la naturaleza. Débora Carbonell, por ejemplo, se encontraba con sus tres hijos, todos cargados con bolsas de basura. "Venimos aquí a pasear todos los días y quería que viesen que es importante que lo que todos disfrutamos esté limpio y cuidado", ha contado.
La convocatoria fue publicada en la cuenta de Instagram @cuidemoselebro, donde Iván Jerez y Miriam Redondo muestran la belleza de este entorno y animan a los zaragozanos a colaborar en mantenerlo limpio recogiendo basura. "Al principio vimos una lata y nos molestaba; al segundo día, la vimos otra vez y al tercer día, nos pusimos manos a la obra", ha recordado Jerez sobre el comienzo de esta iniciativa. Durante este tiempo, se han encontrado objetos y desperdicios de lo más dispar, desde teléfonos móviles hasta una bicicleta abandonada pasando por multitud de mascarillas, toallitas, latas, y bolsas de plástico. "Esta vez hemos llegado un poco tarde porque con la crecida del río muchos desperdicios acaban en el mar", ha indicado. Aún así, antes de comenzar ya tenían claro que encontrarían más residuos de los que les hubiese gustado.
También esperan que esta acción sirva para reivindicar y anime al Ayuntamiento de Zaragoza a incrementar la limpieza en las riberas o llevar a cabo acciones que ayuden a concienciar a la población sobre la importancia de cuidar el medioambiente. Para empezar, Jerez menciona una fácil solución: poner más papeleras. "No entendemos que en más de 1 kilómetro no haya ni una sola", ha lamentado.
