Trabajadores de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) han vuelto a salir a la calle este miércoles como protesta por el retraso del pago de las nóminas por tercer mes consecutivo. Es la segunda vez que escenifican frente a la puerta principal de la institución, en la plaza de España, su rechazo a esta situación, tras el acto al que se sumaron el pasado 20 de diciembre. El presidente provincial, Juan Antonio Sánchez Quero, ha enviado este miércoles un correo electrónico a toda la plantilla para disculparse por la demora y agradecer su "comprensión y paciencia". Ha reiterado que la demora se debe a "problemas técnicos derivados de la adaptación al nuevo sistema informático" y ha indicado que "se han puesto todos los medios para solucionarlo cuanto antes y de forma definitiva". La institución prevé abonar este jueves los salarios.

La concentración ha sido convocada por la comisión permanente de la Junta de Personal, por mayoría de los sindicatos CC. OO., CSL y CSIF, y con la excepción de UGT. Alrededor de 150 personas han participado en la protesta. Como en diciembre, han tenido que salir, criticaron, por la calle Cinco de Marzo, en lugar de hacerlo por la plaza de España.

Los asistentes han escenificado su malestar con silbatos, carteles y pidiendo la dimisión del presidente provincial, Juan Antonio Sánchez Quero. Isabel López Martínez, presidenta de la junta de personal por CC. OO. ha indicado que la protesta responde a la "mala gestión de personal" que lleva a cabo la institución y a la "falta de información solicitada por los representantes de los trabajadores en relación con el cobro de las nóminas". Se ha solicitado de forma oficial una reunión con Sánchez Quero para que, junto a los responsables de la sección de Nóminas y de la adjudicataria del sistema informático, les den "explicaciones convincentes". "No podemos estar con esta inquietud todos los meses", ha indicado. Sánchez Quero, en la carta, ha adelantado que la semana que viene se reunirá con la empresa y con los servicios implicados.

Al retraso en el pago de la nómina de enero para los 700 trabajadores de la DPZ se suma, dijeron, que no han cobrado los atrasos de la subida salarial de 2019. Además, recordaron que al personal del servicio de Extinción de Incendios se les debe las horas extraordinarias desde el pasado mes de mayo de 2019 (a la concentración han acudido unos 50 bomberos) -una cantidad que puede oscilar entre los 4.000 y los 6.000 euros-. También criticaron "la falta de plantilla en este servicio y las plazas vacantes que no se cubren y además ahora suspende cautelarmente la oposición".

Desde la DPZ reiteraron sus "más sinceras disculpas por los inconvenientes que estos retrasos puedan estar causando a los trabajadores de la institución". Fuentes oficiales agradecieron "el enorme esfuerzo" que están realizando todas las personas implicadas en solucionarlo.