Las actividades para toda la familia han sido las protagonistas de los actos matinales del último día de fiestas en Utebo. Los pequeños, aunque algún mayor también se ha colado, se lo han pasado en grande con la magia y el humor de Nando Caneca y su espectáculo 'Wooow'. El mago ha optado por saludar a todos los presentes, con la intención de ganarse el cariño del público y predisponerlos a pasárselo bien. Ese entusiasmo y energía ha hecho que algún niño se alejara de las primeras filas para no participar en el show como voluntario. Así que el presentador se ha tenido que quedar con los que han permanecido en su sitio sin inquietarse por si les tocaba salir a escena. 

Una niña ha sido la encargada de abrir fuego, con un truco en el que intervenía un periódico, que se arrugaba y desarrugaba a voluntad del mago e incluso de su interior sacaba dulces como piruletas. A continuación, un niño ha sido el elegido para ayudar al mago a convocar su magia. Gracias a este, una cuerda que parecía no poder ir a desanudarse jamás se ha podido cortar como si fuera un papel. El mago ha basado el éxito del espectáculo en la interacción con el público que ha respondido de forma muy positiva y divertida a las llamadas de este desde el escenario. 

Por la tarde, los pequeños siguen siendo los que mayor jolgorio encuentran con el chiquiencierro a las 20.15 y la verbena infantil a las 20.30. A continuación, tocará despedirse de las fiestas hasta el año que viene con la traca final a las 23.45.

Un pregón muy visual desata la diversión en Utebo