Llegó y convenció a un auditorio entregado que abarrotó la Sala Mozart de Zaragoza para escuchar sus proclamas. Santiago Abascal, el líder de Vox, se mostró este jueves convencido de que "el sentido común es imparable", y su partido es "un proyecto ganador, porque España es ganadora". A pesar del "cordón sanitario" dictado -contra ellos- por las oligarquías políticas e incluso por Emmanuel Macron, el "gallo francés", desde el Elíseo.

Con gritos de "presidente, presidente" y haciendo ondear cientos de banderas rojigualdas recibieron los zaragozanos a Abascal, que agradeció su asistencia al mitin "por amor a España, al futuro de sus hijos y a la herencia de sus padres". Porque Vox, según resaltó, es "una alternativa que ya ha traído el cambio en Andalucía y va a tener consecuencias políticas". Fijó el éxito de su partido en que para la mayoría de los españoles los problemas son "el separatismo y el frente popular que se ha instalado en la Moncloa". Y sus apoyos crecen a pesar de las concentraciones que convoca la ultraizquierda, "manifestaciones ilegales" animadas por el "grito guerracivilista" del "no pasarán", aunque ellos -dijo- ya han pasado.

El mitin de este jueves comenzó con un ligero retraso por los incidentes que se registraron en los aledaños de la Sala Mozart. Abascal dedicó más un cuarto de hora a repartir besos y sonrisas entre sus seguidores. Un aforo que se llenó de forma voluntaria, y no por los "bocadillos, autobuses y sueldos" que utilizan otros partidos. De Zaragoza destacó la Academia General Militar y la forma en la que se plantó cara a los franceses en la Guerra de la Independencia.

Muy aclamado fue José Antonio Ortega Lara, que dio a todos la  bienvenida a "la resistencia frente a la estrategia de disolver la nación". Cuando se cumplen 23 años del inicio de su secuestro por la banda terrorista ETA, hizo hincapié en que su partido se ha "curtido la piel" ante los ataques "pero no ha envilecido su corazón y su alma". Lo importante es que "la España viva se ha rebelado" y que la defensa de la unidad de España y de la promoción de la vida, la libertad y la propiedad inspiran la razón de ser de Vox. Como ya hiciera en Teruel, defendió un Plan Hidrológico Nacional con trasvases incluidos, una propuesta aplaudida, pero mucho menos, en un auditorio entregado.

Santiago Morón, presidente de Vox en Zaragoza, reiteró su rechazo al Estado autonómico y las comarcas, como agencias de colocación, y censuró el escaso eco que se dio el 18 de diciembre al 900 aniversario de la reconquista de Zaragoza por Alfonso I el Batallador. Cargó contra el presidente de Aragón, Javier Lambán, que "ya no engaña a nadie", por reconocer el catalán como lengua oficial. También censuró que el PSOE haya "apoyado al engominado alcalde Pedro Santisteve, rechazado por su sectarismo, que ha malgestionado la segunda ciudad más endeudada de España y que subvenciona a los okupas en Torrero y al Buñuel, donde dan charlas terroristas con delitos de sangre". Animó al auditorio a premiar con aplausos a José Manuel, miembro de Vox agredido en Delicias.