Condenado a seis años de cárcel por captar a 17 menores en internet para grabarlos desnudos

El acusado se abrió varios perfiles falsos y se hacía pasar por una chica de la edad de las víctimas, de entre 9 y 17 años.

Iván José M. H., a la derecha, declaró en el juicio asistido por un intérprete puesto que es sordomudo.
Iván José M. H., a la derecha, declaró en el juicio asistido por un intérprete puesto que es sordomudo.
José Miguel Marco

Iván José Martínez Herce, un vecino de Zaragoza de 28 años, ingresó el pasado 2 de mayo en la cárcel para cumplir seis años de condena por un delito de utilización de menores. La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Zaragoza ha considerado probado en su sentencia que en varios periodos de los años 2011, 2012 , 2013 y 2016, el joven contactó por internet —a través de redes sociales como Tuenti y Facebook y utilizando también una red de mensajería instantánea llamada ooVoo— con al menos 17 varones de 9 a 17 años residentes en varias provincias para conseguir imágenes y vídeos en los que apareciesen desnudos realizando actos sexuales, como masturbaciones.

La acción delictiva del condenado no finalizaba en la petición de imágenes, según el tribunal, que añade que el condenado, que es sordomudo, intentaba quedar en persona con los chicos para mantener con ellos relaciones "y satisfacer su instinto libinidoso". El modus operandi de este joven a la hora de contactar con sus víctimas era siempre el mismo: se abrió varios perfiles falsos en las redes sociales a nombre de chicas jóvenes y enviaba a los menores, también sordomudos o con dificultades hipoacústicas, fotos subidas de tono extraídas de internet simulando que se trataba de la titular de la cuenta. Después, les decía a sus interlocutores que hicieran lo mismo que él.

Una vez establecida esta relación de confianza, Iván José proponía verse en persona. Uno de los menores accedió y acudió a la vivienda del condenado, donde fue sometido a tocamientos "a cambio de dinero y videojuegos". Los menores que no cedieron a sus pretensiones sufrieron diversas amenazas y coacciones, como que iba a subir a Youtube los vídeos que le habían mandado.

Los investigadores de la Policía Nacional registraron la vivienda de Iván José a finales de octubre de 2013 y en su habitación hallaron varios discos de memoria con los vídeos y las imágenes que había obtenido de sus víctimas perfectamente ordenadas en carpetas. La Fiscalía solicitó para él más de 40 años de cárcel por una veintena de delitos cometidos sobre 17 menores. La Audiencia le condenó a 17 años de cárcel y a 50 de libertad vigilada, por todos los ilícitos que pedía el ministerio público, pero el joven no pasará más de seis años en prisión, ya que en virtud de lo establecido en el Código Penal, cumplirá el triple de la máxima pena impuesta, que en este caso son dos años por captación y utilización de menores para elaborar material pornográfico.

Además, el tribunal consideró que en el caso de Iván José Martínez concurre cuatro atenuantes, entre ellas las de reparación del daño –antes del juicio consignó en la cuenta del juzgado 62.000 euros para resarcir a sus víctimas– y la de alteraciones en la percepción. Los magistrados creen que la capacidad cognitiva del joven se ha podido ver "alterada" en cuanto a su "percepción y comprensión". "Los hechos no corresponden a una conducta sexual disfuncional (...) más bien están relacionados con la manera de concebir la forma de relacionarse sexualmente dentro de su comunidad, donde parece habitual que la edad no sea un factor condicionante que los limite", recoge la sentencia. Igualmente le aplican la atenuante de dilaciones indebidas porque aunque la causa comenzó a tramitarse a finales de septiembre de 2013 no fue hasta mediados de junio de 2017 cuando se redactó el escrito de acusación de la Fiscalía y en ningún momento se tomó declaración a las víctimas.

Además, aprecian la atenuante de confesión, ya que reconoció los hechos desde el primer día con "manifestaciones sinceras y ajustadas a la realidad". Los magistrados creen que esto se debe a que "no era totalmente consciente de la gravedad de sus actos". "Cuando fui detenido en 2013 no sabía que no se podían realizar estos intercambios con menores, pero ya lo aprendí y no lo he vuelto a hacer", afirmó el acusado en el juicio.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión