Manuel O. L., detenido en la noche del jueves como presunto autor del incendio del piso de su expareja, ocurrido el pasado 22 de agosto en Torrero, pasará este domingo a disposición judicial. Independiente de si el juez de guardia decide enviarlo o no a prisión por el fuego, que causó lesiones leves por quemaduras a cuatro personas, entre ellos los dos hijos de su excompañera, este lunes deberá volver a la Ciudad de la Justicia para ser juzgado por un delito de lesiones por el que el fiscal le pide nueve meses de prisión.

Estas lesiones se las causó supuestamente a Tamara V., su excompañera sentimental, el 16 de agosto, seis días antes de producirse el incendio. Según el fiscal, el motivo fue que Manuel O. L. no está de acuerdo con que la mujer haya cortado la relación que mantuvieron hasta el pasado mes de junio. Desde entonces, le ha enviado mensajes deseándole la muerte y diciéndole que nadie la iba a querer. Ese 16 de agosto, la mujer estaba en la terraza de un bar de la calle de Pablo Parellada con una amiga cuando el acusado llegó, se sentó en una mesa contigua y comenzó a insultarla de forma obscena. Ante su actitud, ella entró en el bar y él la siguió y la empujó con fuerza. Al ser sacado del local por su comportamiento, volvió a entrar, se dirigió a la mujer, le dio un cabezazo en la frente y se fue.

Todo lo anterior fue presenciado por una amiga de Tamara V., la cual la acompañó a presentar una denuncia y declaró ante la Policía. Cuatro días después, esta mujer denunció a Manuel O. L. por amenazarla de muerte por haber testificado a favor de su amiga, y desde entonces tiene una orden de alejamiento respecto a ella. El acusado, representado por el abogado Óscar Espinosa, afirmó ante el juez que las dos mujeres mentían y que ni había agredido a Tamara V. ni había amenazado a su amiga.

Todos estos hechos previos al incendio del piso -unidos a un mensaje en el que parece admitir ser el autor del fuego- hicieron que las sospechas recayeran sobre él desde el primer momento.