La Policía Nacional cree que Juan Antonio Aranda Moreno, el vecino de Calatayud fallecido el pasado sábado en Calatayud tras pelearse con el padre de un compañero de su hijo, fue atacado no una sino dos veces. Según informó ayer la Jefatura Superior de Aragón, la primera agresión se produjo sobre las 19.00 en la calle Barranco de Soria, de donde la víctima logró escapar a pie "apresuradamente" acompañado de su mujer y su hijo. Sin embargo, los investigadores cuentan con el testimonio de un vecino que asegura que vio cómo Jesús L. M. les siguió con un vehículo y les dio alcance a unos 200 metros, justo a la altura de la plaza de Juan el Viejo. Siempre según la versión de esta persona, fue allí donde el agresor nuevamente "abordó a la víctima y le propinó varios golpes".

Como informó ayer HERALDO, poco después de estos hechos, cuando el agredido se dirigía hacía su domicilio, cayó desplomado en plena calle. Una ambulancia del 061 se desplazó enseguida hasta allí para socorrerle, pero las maniobras de reanimación de los sanitarios no lograron salvarle la vida.Padecía del corazón

Juan Antonio Aranda, de 52 años, tenía problemas de corazón, de ahí que al principio se barajara la posibilidad de que, fruto del acaloramiento, hubiera sufrido un infarto.Sin embargo, al practicar la autopsia al cadáver en el Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA), los forenses descubrieron que presentaba varios hematomas en la cabeza "causados probablemente por un traumatismo" y que la causa de la muerte había sido una hemorragia cerebral.

Con el atestado policial y el informe preliminar de los forenses en la mano, la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Calatayud tomó declaración el lunes al Jesús L. M. –detenido poco después de la agresión por un delito de homicidio– y optó por dejarlo en libertad provisional sin fianza, tal y como pedía su abogado, José Cabrejas.

Según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de Aragón, el informe preliminar de la autopsia que consta en el juzgado "no deja claro" si la muerte de Juan Antonio Aranda fue "natural o violenta". "Dado –añade– que también pudo deberse a los problemas cardiacos que este sufría". Ante la duda, la juez decidió dejar libre al autor de la agresión a la espera de que llegue el informe definitivo de los forenses. En ese momento y una vez concretada la causa del deceso, la instructora podría revisar si es necesario las medidas cautelares. No obstante y a pesar de la gravedad de los hechos investigados, la Fiscalía no estuvo presente en la declaración y, como la familia del fallecido aún no se ha personado en las actuaciones con abogado, nadie pidió la medida de prisión provisional.La juez va a llamar a los testigos

Hasta el momento, la jueza solo ha tomado declaración al encausado, pero tiene previsto empezar a llamar a los testigos de forma inminente. Una de las primeras en comparecer en el juzgado será la esposa del fallecido, que estaba presente cuando fue agredido y fue quien identificó al atacante como un hombre al que apodaban ‘Starky’. Durante su declaración ante la Policía, esta contó también a los agentes que en varias ocasiones rogó al atacante que dejara de golpear a su marido, advirtiéndole de que padecía del corazón.

Pero la versión de esta mujer fue negada por el presunto agresor, quien mantiene que "ni ella ni nadie" le informaron "en ningún momento" de la enfermedad cardíaca del finado. Al ser interrogado en el juzgado de guardia, Jesús L. M. negó también que persiguiera con su furgoneta a la víctima tras la primera pelea.