Reparan los caminos de ribera del Gállego aguas abajo del puente de Santa Isabel

El Ayuntamiento de Zaragoza está finalizando las obras de asentamiento de las riberas del río Gállego aguas abajo del puente de Santa Isabel hasta su desembocadura, una actuación encaminada a la recuperación de infraestructuras dañadas y a la mejora del estado de las márgenes en su tramo final.

Han sido diversos los factores que han provocado el dinamismo del cauce en este tramo, la desfiguración paulatina de sus márgenes y la consiguiente ruptura del equilibrio natural. Por un lado, ya en la década de los años 60 y 70 se produjeron graves alteraciones debido a las extracciones de áridos y la ocupación de parte de la llanura de inundación, lo que motivó que el Gállego pasara en su tramo final de tener un cauce trenzado con brazos múltiples a un canal único más rectilíneo y encajonado. "El río movió mucha grava, se ha quedado encorsetado en unos límites que no son los suyos", explican desde la dirección municipal de la obra, gestionada por la Unidad de Conservación del Medio Natural.

Además, los episodios de crecida del río Gállego en 2012, con caudales que alcanzaron máximos de hasta 826 metros cúbicos por segundo, provocó que se acentuaran estas afecciones y se generaran numerosos puntos de erosión.

Las obras, ya muy avanzadas, consisten en la consolidación de la margen derecha mediante la construcción de una estructura de unos 300 metros de longitud de gaviones, unas estructuras de celdas de malla de alambre de un metro de altura y rellenas con gravas clasificadas del propio río obtenidas de las excavaciones del canal que se ejecuta y de las cimentaciones, es decir, dentro del propio ámbito de la obra. Estas celdas se montan a modo de lego creando estructuras escalonadas. En esta misma margen también se ha repuesto el camino peatonal y de ciclistas, que había sufrido varios desperfectos por distintos puntos como consecuencia del cambio de curvatura y desplazamiento del cauce.

En la margen izquierda también se reafirmarán unos 594 metros de camino de ribera y se retirarán afloramientos.

Por otro lado, se ha construido un canal de aguas altas más elevado que el actual cauce en una excavación de tierras ya abierta, tratando así de recuperar un antiguo brazo del río.

La obra la ejecutan los Hermanos Caudevilla y fue adjudicada por 308.636,57 euros. Es una actuación promovida por el Ayuntamiento de Zaragoza a través de Zaragoza Vivienda, y para su ejecución se ha contado con una subvención del 50% por parte del Ministerio de Administraciones Públicas dentro del paquete de ayudas a actuaciones ocasionados por riadas a municipios. El plazo de ejecución es de cuatro meses, y en el mes que resta se ejecutarán los últimos remates pendientes.